Lisboa (EuroEFE).- La inmigración y la defensa europea son los principales temas para los portugueses de cara a las elecciones europeas de junio, bajo la amenaza de la abstención, que en los anteriores comicios, en 2019, alcanzó un máximo histórico próximo al 70 % en el país.

Estas cuestiones han liderado los programas de los partidos políticos en Portugal, así como los debates televisados que se han celebrado hasta la fecha.

En materia de migración, las fuerzas políticas coinciden en que es necesario controlar mejor la entrada irregular de migrantes a la Unión Europea (UE) y combatir las redes de tráfico de personas, que han protagonizado múltiples titulares en los últimos años.

Hay bastante consenso en que es necesario potenciar la cohesión territorial del bloque y mejorar el Pacto europeo sobre Migración y Asilo, principalmente entre las fuerzas políticas lusas de mayor representación parlamentaria: el Partido Socialista (PS) y la coalición conservadora Alianza Democrática (AD), que gobierna actualmente en Portugal y que está liderada por el Partido Social Demócrata.

Contrastan con la tercera fuerza, el ultraderechista Chega, que aboga por abandonar el acuerdo migratorio de la ONU, revocar el pacto de movilidad de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (todos, salvo Portugal, fuera de la Unión Europea) y la «adopción generalizada en la UE de los modelos que el Reino Unido ha implantado», en alusión al envío a terceros países de los solicitantes de asilo.

En lo que respecta a la defensa europea, el apoyo a Ucrania y su integración en la UE y un mayor desarrollo de la industria militar europea son dos de los pocos temas en los que coinciden la mayoría de partidos.

AD está a favor de fortalecer las fronteras europeas, crear un mercado único para la defensa y desarrollar un mecanismo de compras conjuntas de material militar, mientras que los socialistas, con menores referencias al tema, priorizan reforzar la Política Común de Seguridad y Defensa.

La ultraderecha pide el refuerzo de las capacidades de la OTAN y la modernización de equipamientos castrenses.

Estos dos temas compiten con otro aspecto clave en las elecciones, que se celebran en los 27 países de la UE del 6 al 9 de junio (en el caso de Portugal el día 9): los altos niveles de abstención.

Para prevenirla, han sido varios los llamamientos tanto de la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, como de los políticos lusos, que han lanzado una campaña de sensibilización.

Dentro de esos esfuerzos, los portugueses van a poder votar desde cualquier punto del país el próximo 9 de junio o hacerlo de forma anticipada una semana antes: todo ello con el objetivo de aumentar la participación, que en 2019 fue del 30,75 %.

De momento no parece que esté todo perdido, ya que el 77 % de los jóvenes portugueses menores de 30 años tiene intención de votar en estas elecciones, según reveló un Eurobarómetro publicado a mediados de mayo basado en encuestas realizadas en abril.

Esta cifra se sitúa por encima de la media europea, que se encuentra en el 64 %, de acuerdo al Eurobarómetro, que se basó en entrevistas a 26.189 personas de entre 15 y 30 años, ya que en algunos países de la UE se permite votar a partir de los 16 años.

Más allá de estos asuntos, temas que ocupan la agenda política nacional como la crisis de vivienda, los bajos salarios, el apoyo a los jóvenes y la transición energética están siendo objeto de debate entre los candidatos lusos a las europeas, en un guiño al electorado del país y en un intento de que estos aspectos lleguen a Bruselas.

Editado por Sandra Municio

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Madrid (EuroEFE).- Amaia, Cristina y María son las EUgenias, tres jóvenes periodistas especializadas en la UE y ahora creadoras digitales con un objetivo claro: movilizar el voto de su generación en las elecciones europeas de junio para que se hable de los temas que les preocupan y aumentar su representación en las instituciones.

Beneficiarias las tres de la beca Schuman, que permite hacer prácticas en el Parlamento Europeo, y con trayectorias laborales ligadas a la información europea, Amaia Echevarría, Cristina Gallego y María Moya empezaron compartiendo memes sobre la UE por pura diversión en un grupo de WhatsApp que crearon.

De ese grupo, llamado EUgenias, nace el proyecto digital que han puesto en marcha con la intención de llegar a los jóvenes de su generación, que «por desgracia» muchas veces dan por sentado la existencia de la UE y los beneficios de pertenecer a ella, explica Moya a EFE.

«En el lenguaje que nosotras hablamos en el día a día», en cuentas en Instagram y TikTok, «lo que hacemos es crear contenido sobre la UE basándonos en los ‘trends’ (tendencias) que vemos y que nos hacen gracia», añade Moya.

«Lo que hacemos es coger memes, ‘trends’ o canciones que están de moda y pensamos cómo podemos adaptarlo a un contenido de la UE, y siempre se nos ocurren mil cosas», resume Gallego.

Además, se han asociado con Polétika, plataforma sin ánimo de lucro de organizaciones y movimientos de la sociedad civil, para realizar una campaña dedicada a animar a los jóvenes a votar en las elecciones europeas del próximo 9 de junio.

Gallego es optimista sobre la movilización de cara a estos comicios, aunque advierte de que «falta intención» de voto sobre todo entre las mujeres.

Este año las europeas no coinciden con ninguna otra convocatoria electoral en España, como sí ha ocurrido otras veces, y eso da «un poco de miedo» en cuanto a la participación que pueda haber, según Gallego, porque muchos ciudadanos ven a la UE como algo lejano.

Pero la UE «no está tan lejos, más de la mitad de las normas que tenemos en España vienen de Bruselas», argumenta Gallego.

En la misma línea, Echevarría dice que los contenidos que elaboran sobre leyes españolas que vienen de la UE suelen «despertar mucho interés», como «la del tapón atado» a las botellas de plástico, que procede de una directiva europea para promover la economía circular.

«Queremos fomentar el voto joven porque las personas jóvenes estamos infrarrepresentadas en las instituciones» europeas y «tenemos grandes preocupaciones que queremos que estén sobre la mesa» sobre temas como la vivienda, la inserción laboral y la protección del medio ambiente, afirma Echevarría.

A su juicio, esos temas no se abordan en parte porque «no forman parte de las competencias directas» que tiene la UE y también porque falta una perspectiva juvenil en la toma de decisiones -la media de edad de los eurodiputados de esta legislatura es de 52 años-.

«Como dice el Parlamento Europeo, ‘si no votas, otros votarán por ti’», recuerda Echevarría.

Editado por Sandra Municio

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Jerusalén (EuroEFE).- Las autoridades israelíes, así como los líderes del grupo islamista palestino Hamás, se mostraron este lunes indignados por la petición del fiscal general de la Corte Penal Internacional, Karim Khan, de solicitar órdenes de arresto contra los principales responsables de la guerra en Gaza, a quienes acusa de crímenes de guerra y lesa humanidad.

«El anuncio del fiscal de la CPI es más que escandaloso y muestra hasta qué punto el sistema judicial internacional está en peligro de colapsar», dijo en un mensaje el presidente de Israel, Isaac Herzog.

Hamás, por su parte, acusó a Khan de «comparar a la víctima con el verdugo» al buscar órdenes de arresto contra los líderes de la formación islamista Yahya Sinwar, Ismail Haniyeh y Mohamed Deif, junto con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant.

La decisión del fiscal, rumoreada durante semanas, se produce cuando los muertos en la Franja de Gaza superan ya los 35.500 y el Ejército israelí recrudece su ofensiva en el norte del enclave tras más de siete meses de guerra.

La solicitud de Khan

En su solicitud, el fiscal solicita autorización a los jueces para emitir ordenes de arresto contra Yahya Sinwar, jefe del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) en Gaza; Mohammed Diab Ibrahim al Masri, conocido como Deif y comandante en jefe del ala militar de Hamás (las Brigadas Al Qasam); así como Ismail Haniyeh, jefe de la oficina política del grupo palestino y autoexiliado en Catar.

Khan los considera «penalmente» responsables de «crímenes de guerra y lesa humanidad» cometidos en territorio de Israel y el Estado de Palestina desde al menos el 7 de octubre de 2023, lo que incluye «el asesinato de cientos de civiles israelíes» en ataques perpetrados por Hamás y otros grupos armados, así como «la toma de al menos 245 rehenes».

Asimismo, el fiscal pide órdenes de detención contra Netanyahu y Gallant por crímenes de guerra y lesa humanidad cometidos «en el territorio del Estado de Palestina (Franja de Gaza) desde al menos el 8 de octubre de 2023», es decir, el día después del ataque de Hamás y fecha del inicio de la actual guerra israelí en Gaza.

Entre los crímenes de los que responsabiliza a ambos funcionarios israelíes está el uso del hambre como «método de guerra» contra los civiles y el «asesinato intencionado».

Una cuestión de jurisdicción

Israel no es miembro de la CPI por lo que no estaría obligada a acatar una potencial orden de detención del órgano, con sede en La Haya (Países Bajos).

Sin embargo, todos los países de la Unión Europea han ratificado el Estatuto de Roma, por lo que técnicamente tendrían que extraditar al mandatario israelí si cruza sus fronteras.

«Se supone que Bibi (Netanyahu) y Yoav Gallant no podrán viajar al menos a los países miembros de la CPI, lo que podría dañar la cooperación de seguridad en muchos frentes. Pero tampoco sabemos si los países europeos van a cooperar (con la CPI)», dijo este lunes en un evento con la prensa la abogada Anne Herzberg, asesora legal de NGO Monitor, un grupo que supervisa las labores de organismos humanitarios en Israel.

Herzberg se mostró indignada por la decisión del fiscal general del órgano, a quien acusó de estar motivado políticamente, y calificó la noticia de una victoria para Hamás, para Irán, y para los grupos terroristas de todo el mundo.

También puso en duda que la CPI tenga jurisdicción para actuar contra israelíes, ya que el país no es miembro del órgano, al igual que Estados Unidos.

En contraposición a sus críticas, el grupo israelí B’Tselem, que trabaja para combatir los abusos de las autoridades israelíes en los territorios palestinos ocupados, calificó la decisión de Khan de el final de «la era de la impunidad para los líderes israelíes».

«En vistas a la escalada de la violencia, es nuestro deber dejar claro: el régimen israelí que controla el territorio entre el río Jordán y el mar Mediterráneo no puede, y no quiere, investigar sus propios crímenes contra los palestinos», aseguró la organización en un comunicado.

Editado por Sandra Municio