Ciencia y Salud
Muere el papa Francisco durante su convalencencia por infección respiratoria

La muerte del papa, a los 88 años, ha sido anunciada en un vídeo mensaje por el camarlengo, el cardenal Kevin Joseph Farrel.
“Con profundo dolor tengo que anunciar que el papa Francisco ha muerto a las 7.35 horas de hoy, el obispo de Roma ha vuelto a la casa del padre, su vida entera ha estado dedicada al servicio del Señor y de su Iglesia y nos ha enseñado el valor del evangelio con fidelidad, valor y amor universal y en manera particular a favor de los más pobres y marginados”, anunció Farrel.
Y continuó: “Con inmensa gratitud por su ejemplo como discípulo del Señor Jesús recomendamos el alma del papa Francisco al infinito amor misericordioso de Dios Uno e trino”.
En el vídeo, grabado en la capilla de la Casa Santa Marta, también aparecen el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, y el sustituto de la secretaria de Estado, el venezolano Edgar Peña Parra, y el maestro de ceremonias, Diego Ravelli.

¿Qué ha causado la muerte al papa?
Las causas del fallecimiento del papa se darán a conocer a última hora de esta tarde tras el rito de la constatación de la muerte que tendrá lugar a partir de las 20.00, hora local (18.00 GMT), en la capilla de la residencia de Santa Marta.
Por ahora estos son los escasos detalles que llegan desde la oficina de prensa del Vaticano, que sólo comunicó que el féretro será velado en la capilla de su residencia y que en este lugar se hará la constatación de la muerte por disposición en vida del pontífice, ya que antes de Francisco esto se hacía en la capilla del Palacio Apostólico.
Convaleciente de una infección respiratoria
La muerte ha sorprendido al papa argentino cuando estaba en el periodo de convalecencia en su residencia tras un ingreso de 38 días originado por una neumonía bilateral que le ocasionó dos crisis respiratorias que pusieron su vida en peligro.
El pontífice ingresó el pasado 14 de febrero en el Hospital Gemelli de Roma a causa de una neumonia bilateral, que afecta a los dos pulmones, originada por diferentes microorganismos que complicó su estado de salud no solo con dos crisis respiratorias, sino también con una insuficiencia renal que superó.
Francisco también padeció una bronquiectasia que, según los expertos, es muy frecuente en personas que tienen una patología respiratoria de base como asma, bronquitis o bronquitis asmática.
Un escenario que encendió las alarmas sobre su estado dada su avanzada edad y por el hecho de que le fue extirpado una parte del pulmón durante su juventud, con 21 años, a consecuencia de una grave neumonía.
En su estancia en el hospital necesitó ventilación mecánica no invasiva y fisioterapia respiratoria, además de perder la voz que fue recuperando de forma lenta y que aún se le notaba débil.
Durante la mayor parte de su ingreso en el Gemelli el papa tuvo pronóstico reservado y en las dos crisis respiratorias su vida estuvo en peligro.
Francisco recibió el alta el pasado 23 de marzo del Hospital Gemelli pero continuó con su recuperación en su residencia del Vaticano con apariciones muy esporádicas.
Su última aparición pública
Francisco, que había estado ausente en todos los ritos de la Semana Santa al seguir convaleciente, apareció este Domingo de Resurrección en el balcón de la logia central de la fachada de la basílica de San Pedro para la bendición Urbi et Orbi.
Después recorrió la plaza en papamóvil a pesar de sus condiciones de salud en lo que ahora puede considerarse su último adiós a los fieles.
El papa recorrió la plaza de San Pedro en papamóvil durante varios minutos e incluso detuvo el vehículo para bendecir a algunos niños, aunque se le notaba muy ausente y con dificultad en los movimientos.
Durante la mañana, recibió al vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, en su residencia de Santa Marta para un breve saludo e intercambiar una felicitación por la Pascua, informó la oficina de prensa del Vaticano.
Las otras enfermedades del papa
Hace casi dos años, el 7 de junio de 2023, el papa fue intervenido de una hernia abdominal para evitar una obstrucción intestinal y que fue fruto de una antigua operación de peritonitis en su país que, quizá, según los médicos del Gemelli, le habrían dejado “adherencias” o cicatrices internas en el intestino.
A finales de marzo de 2023 también estuvo ingresado en el hospital romano por una “pulmonía aguda”.
Francisco fue además operado del colon por diverticulos en el mismo centro sanitario el 4 de julio de 2021, con la extirpación de 33 centímetros de intestino, y fue dado de alta después de diez días, a los que siguió una lenta recuperación.
El primer papa latinoamericano
Jorge María Bergoglio, de origen italiano, nació en Buenos Aires el 17 de diciembre de 1936 y se convirtió en el primer papa latinoamericano y también el primer jesuita que llega al Estado Vaticano.
Graduado en Ciencias Químicas y licenciado en Filosofía y Teología, en 1958 ingresó en el noviciado de la Compañía de Jesús.
Creado cardenal por Juan Pablo II en 2001, entre 2005 y 2011 presidió la Conferencia Episcopal Argentina.
El 13 de marzo de 2013 fue elegido papa en el segundo día de cónclave y al quinto escrutinio y se convirtió en el pontífice número 266 de la Iglesia católica, obispo de Roma y octavo jefe del Estado Vaticano en sustitución de Benedicto XVI quien renunció al pontificado por su “edad avanzada” y murió el 31 de diciembre de 2022.
Cercano y sencillo, Francisco impuso un nuevo estilo en las formas y ornamentos pontificales. En su primera aparición como papa se presentó con la sotana blanca, sin la tradicional muceta roja y con una estola más sencilla que la usada por sus antecesores.
Rehusó también a los zapatos rojos de los papas; llevaba la cruz pectoral de su etapa de arzobispo y el anillo del Pescador, símbolo de poder papal que, aunque bañado en oro, mandó confeccionar en plata.
La entrada Muere el papa Francisco durante su convalencencia por infección respiratoria se publicó primero en EFE Salud.
Ciencia y Salud
Robe Iniesta canceló sus conciertos en 2024 por un tromboembolismo pulmonar: te contamos qué es
Robe Iniesta, líder de Extremoduro, referente del rock nacional, ha fallecido este miércoles a los 63 años por causa que no ha trascendido, aunque en noviembre del año pasado la agencia que le representa difundió un comunicado en el que informaba de que como consecuencia de un tromboembolismo pulmonar, se veía obligado a cancelar los conciertos programados y a guardar “reposo absoluto”.
El tromboembolismo pulmonar, también conocido como embolia pulmonar, es una de las complicaciones más graves derivadas de la formación de trombos en el sistema circulatorio.
Según la Fundación Española del Corazón, se trata de “una oclusión o taponamiento de una parte del territorio arterial pulmonar (vasos sanguíneos que llevan sangre pobre en oxígeno desde el corazón hasta los pulmones para oxigenarla) a causa de un émbolo o trombo que procede de otra parte del cuerpo”.
Añade esta entidad en su web que en la mayoría de los casos el trombo o coágulo “se forma en las venas de los miembros inferiores y migra hasta la arteria pulmonar”.
La oclusión, por tanto, afecta sobre todo a los pulmones y al corazón, de modo que una zona de los pulmones recibe sangre pobre en oxígeno, y como no se puede oxigenar adecuadamente, perjudica la llegada de dicho oxígeno al resto de órganos.
El corazón seguirá bombeando sangre a los pulmones, pero la oclusión no permitirá la circulación adecuada, por lo que aumentará la presión dentro de la arteria pulmonar. El ventrículo derecho del corazón, por ello, se irá debilitando.
Cuenta la Fundación que las manifestaciones clínicas o síntomas más frecuentes son:
- Disnea (sensación de falta de aire).
- Dolor torácico.
- Mareo o desvanecimiento.
- También puede aparecer fiebre y tos con sangre cuando se acompaña de un infarto pulmonar.
- Si el trombo es muy grande y obstruye la arteria pulmonar principal, puede provocar incluso la muerte.
Cómo se detecta el tromboembolismo pulmonar
Por tanto, los signos más comunes incluyen dificultad para respirar, dolor en el pecho y tos, pero los pacientes pueden presentar síntomas leves o incluso ser asintomáticos.
Durante la pandemia de covid-19, diversos estudios demostraron una alta incidencia de tromboembolismo pulmonar en pacientes hospitalizados.
Investigaciones del Hospital Ramón y Cajal y del CIBER de Enfermedades Respiratorias revelaron que el 7,8 % de los pacientes ingresados por covid-19 sufrió embolias pulmonares y que la prevalencia aumentaba hasta el 27,9 % en las unidades de cuidados intensivos.
El tratamiento del tromboembolismo pulmonar se centra en evitar la progresión del coágulo y prevenir nuevos episodios
En el Hospital del Mar de Barcelona, los médicos observaron que uno de cada tres pacientes semicríticos con ventilación no invasiva desarrollaba una embolia pulmonar si acababa siendo intubado.
El diagnóstico suele apoyarse en pruebas como el análisis del D-dímero, un marcador de coagulación que se eleva cuando existe formación de trombos, y en estudios de imagen como el TAC o la ecografía de miembros inferiores.
Estas herramientas permiten confirmar la presencia del coágulo y determinar su localización exacta.
Cómo se trata el tromboembolismo pulmonar
El tratamiento del tromboembolismo pulmonar se centra en evitar la progresión del coágulo y prevenir nuevos episodios.
Los especialistas recomiendan el uso de anticoagulantes, como la heparina, para reducir el riesgo de formación de trombos.
Indica la Fundación Española del Corazón en su web que en una minoría de pacientes, habitualmente los más críticos o en aquellos que no pueden recibir anticoagulantes, se requieren otros tratamientos como la fibrinólisis para acelerar la disolución del coágulo o la colocación de un filtro en la vena cava para evitar que nuevos trombos migren al pulmón.
Por regla general, pasados los primeros días y una vez en su domicilio, el paciente deberá tomar anticoagulantes por vía oral (Sintrom, Xarelto, Eliquis, Pradaxa y Lixiana) durante un periodo mínimo de 3 meses.

Avances recientes han permitido desarrollar herramientas predictivas que ayudan a los profesionales sanitarios a valorar el riesgo de muerte en pacientes con embolia pulmonar aguda.
Según un estudio del Hospital Germans Trias, nuevas tecnologías permiten decidir mejor el lugar de ingreso y el tratamiento más adecuado, reduciendo tanto los ingresos innecesarios como las altas prematuras.
La embolia pulmonar tiene una incidencia de entre 39 y 115 casos por cada 100.000 habitantes y puede alcanzar una mortalidad del 30 % en sus formas más graves.
En el ámbito oncológico, una nueva escala genética validada en 2023 permite predecir el riesgo de trombosis y tromboembolismo pulmonar en pacientes con cáncer, facilitando la aplicación de tratamientos preventivos y mejorando la supervivencia.
La entrada Robe Iniesta canceló sus conciertos en 2024 por un tromboembolismo pulmonar: te contamos qué es se publicó primero en EFE Salud.
Ciencia y Salud
España tiene a sus médicos jóvenes agotados: las alarmas que enciende este informe
Dice la Organización Médica Colegial de España (OMC) en un reciente informe: “Resulta especialmente paradójico” que los médicos y las médicas más jóvenes sufran tasas tan altas de ‘burnout’ (desgaste y estrés asociados al ejercicio de la profesión) cuando se encuentran en una etapa vital y laboral que “debería estar marcada por la ilusión, la motivación vocacional y el entusiasmo por el aprendizaje”.
Resulta que ni ilusión, ni motivación, ni entusiasmo. Los médicos jóvenes de España están agotados, quemados, por factores como “la sobrecarga laboral, las guardias de 24 horas sin libranza efectiva, la precariedad contractual y la desigualdad de género”, según el informe citado, que se llama ‘Ikerburn: de la vocación al agotamiento’. Fue presentado en el Senado hace poco menos de un mes.
Para la OMC, la lectura es clara: si las personas más jóvenes de la profesión médica sufren sobrecarga de trabajo, precariedad y desigualdad, se resienten “la salud y bienestar de los profesionales, la seguridad del paciente y la sostenibilidad del sistema sanitario”.
‘Burnout’ en más del 50 % de los encuestados/as
“El panorama exige respuestas urgentes que vayan más allá de intervenciones aisladas y apunten hacia reformas organizativas, culturales y legislativas que garanticen condiciones de formación y trabajo saludables, equitativas y seguras”, concluye el estudio, que añade acto seguido:
“El abordaje del ‘burnout’ debe considerarse una prioridad de política sanitaria y una inversión estratégica en capital humano, imprescindible para asegurar la calidad y la continuidad de la atención médica en España”.
El cuidado de los que cuidan a la población sale cuestionado de este informe compuesto por datos rotundos, procedentes de las respuestas dadas por más de 1.400 médicas y médicos con una media de edad ligeramente superior a los 31 años, casi todos cursando primera especialidad (98 %) en la esfera pública.
El perfil de la muestra, de hecho, sería más o menos el siguiente: mujer de poco más de 30 años, en primeros dos años de residencia y en primera especialidad relacionada con la asistencia en hospitales públicos. Además, hace guardias de 24 horas tras las que es difícil librar.
La radiografía que lleva a cabo el informe muestra los siguientes datos:
- Más del 79 % refiere “agotamiento emocional”.
- Casi un 84 % habla de “despersonalización”.
- Poco más del 63 % indica “baja realización personal”.
Agotamiento emocional, despersonalización y baja realización personal son, precisamente, los tres síntomas de ‘burnout’ convenidos a escala internacional. Cuando los autores del estudio combinan los tres vectores para dibujar un retrato más completo, los porcentajes aumentan. Casi un 94 % de los médicos encuestados tendría al menos uno de los síntomas, un 81 % presentaría dos y un 51 % reuniría los tres, el llamado ‘burnout’ completo.
Consecuencias en el descanso y en la vida sexual
Los y las profesionales entrevistados para el informe concretan más.
- Dos de cada tres médicos “refieren insomnio o alteraciones del descanso”.
- Tres de cada cuatro “perciben deterioro en sus vínculos familiares, de pareja o sociales”.
- Un 85 % reconoce “disminución de la líbido”.
- Un 38 % recurre a ansiolíticos, alcohol u otras sustancias como estrategia de afrontamiento.
- Uno de cada cuatro ha tenido incapacidad temporal por agotamiento o causas vinculadas con el ‘burnout’.
No afectan por igual el desgaste y el estrés en la profesión médica cuando los que la ejercen son los más jóvenes. Como señala el estudio, las mujeres presentan más riesgos que los hombres (un 24 % más) y quienes cruzan sus primeros años de residencia están más expuestos al ‘burnout’, lo que lleva a otra conclusión: la juventud es un factor de vulnerabilidad debido a la falta de experiencia.

Son factores de riesgo, asimismo, la concatenación de guardias, porque acumular 5 al mes sin descansar adecuadamente después es causa de altos niveles de ‘burnout’, y la especialidad del encuestado/a, pues las quirúrgicas y las de atención hospitalaria urgente conllevan elevados niveles de exigencia.
Riesgo de “fuga de talentos”
Para la OMC, las consecuencias son graves. Se trata de un “problema estructural” del sistema que impacta en la seguridad del paciente por cuanto arrastra una mayor probabilidad de errores clínicos o de calidad asistencial, y merma los recursos, sobre todo por el incremento de bajas laborales, rotaciones o, sencillamente, abandonos. El “riesgo de fuga de talentos” no puede soslayarse, apunta el informe.
La organización de los médicos traza vías de solución, desde el cumplimiento de la normativa laboral a la reducción de cargas administrativas pasando por los refuerzos de planes de conciliación, de apoyo psicológico (como el PAIME, el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo, poco conocido por los profesionales, como desgrana el informe) y de formación.
Planteado como vía de solución, el proyecto de nuevo Estatuto Marco propuesto por el Ministerio de Sanidad, pero su contenido no convence a los sindicatos médicos. En protesta, han convocado jornadas de huelga, la primera este martes. Reclaman un estatuto propio, independiente del personal sanitario y no sanitario que integra el Sistema Nacional de Salud, y una regulación diferente de aspectos como las guardias o ratios de pacientes.
La entrada España tiene a sus médicos jóvenes agotados: las alarmas que enciende este informe se publicó primero en EFE Salud.
Ciencia y Salud
¿Tomar fármacos contra la obesidad sin hacer dieta ni ejercicio? Un error con consecuencias
Intentar bajar de peso con los fármacos contra la obesidad y la diabetes, los análogos de la GLP-1, pero sin hacer dieta ni ejercicio físico, “es una equivocación total” que puede tener consecuencias, como efecto rebote o, incluso, pérdida severa de masa y fuerza muscular, advierte Jordi Salas-Salvadó, catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad Rovira y Virgili de Tarragona.
“Me he encontrado con muchas personas que quieren bajar de peso sin hacer ningún esfuerzo, sin cuidarse, sin hacer ejercicio, sin tener que hacer dieta. Esto es una equivocación total”, asegura en una entrevista con EFE Salud.
El catedrático e investigador celebra la llegada de estos fármacos contra la diabetes y la obesidad (los popularmente conocidos Ozempic o Mounjaro) convencido de que van a ayudar a muchas personas, pero considera que “se está haciendo un uso irracional” de estos medicamentos.
“No está indicado tomar el fármaco sin dieta y sin ejercicio físico”, insiste el también director del programa de Nutrición del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Obesidad (CIBERobn).
“Primero hay que probar si se puede alcanzar un peso normal a través de dieta y de ejercicio y después tener la autorización de los fármacos, pero siempre con la base de la dieta y el ejercicio físico”, explica.
Y advierte: “El problema con los análogos de la GLP-1 es que a muchos les dan nauseas, les quitan el hambre y eso va muy bien para bajar de peso, pero si no cuidas la dieta, si haces dietas deficitarias, una de las posibles consecuencias de este tipo de fármacos es que pueden producir sarcopenia, pérdida de masa y fuerza muscular, en personas con obesidad y en mayores”.
Pero también otra de las consecuencias es el denominado, efecto rebote: “Cuando una persona toma un fármaco sin hacer ejercicio ni dieta, baja de peso y es entonces cuando lo deja de tomar y se produce un efecto yo-yo”, recupera los kilos perdidos.

La dieta mediterránea, la mejor opción
La dieta mediterránea es el patrón de alimentación que más evidencia científica demuestra en el control de la obesidad y puede ser la más indicada para complementar este tratamiento con fármacos antiobesidad.
“Dependiendo de la restricción calórica que produce el fármaco, puede ser la dieta mediterránea suplementada con otras proteínas, vitaminas y minerales” para evitar deficiencias.
Al margen de estos fármacos, aunque hay diferentes estrategias nutricionales para combatir la obesidad, la dieta mediterránea es la que ocupa el primer lugar, como se ha constatado en la reciente reunión nacional de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) celebrada en Toledo en la que participó Jordi Salas-Salvadó.
“La adherencia a una dieta mediterránea ligeramente hipocalórica, acompañada de actividad física es la mejor estrategia para bajar peso en una persona con sobrepeso u obesidad”, asegura.
En su opinión, “hay diferentes formas de comer saludable pero la que más evidencia científica reúne es la dieta mediterránea” y quedan demostrados sus beneficios en el control de peso y de la diabetes tipo 2 y en la reducción de los factores de riesgo cardiovasculares y de cáncer de mama.
Y así lo han probado dos estudios principales el Predimed 1 y Predimed Plus, los que albergan mayor número de pacientes y recorrido en el tiempo, y tras ser comparada con otras dietas, como la nórdica o la vegetariana.

La base de nuestra alimentación
Esta dieta, a base de frutas, verduras, legumbres, pescado, frutos secos y aceite de oliva, no solo es una herramienta contra la obesidad y otras enfermedades sino que debe ser el patrón de alimentación, como lo era en los años 60 en España.
La adherencia a esta dieta mediterránea se valora por una escala tipo de 14 puntos y, según el profesor, refleja que las personas a partir de los 55 años, sobre todo las mujeres, y con un nivel cultural y económico más alto “son más conscientes de que deben alimentarse mejor y que deben hacer ejercicio”.
La educación en hábitos saludables en los niños es fundamental, pero no solo en las escuelas, también en casa porque, reconoce, “los adultos tampoco damos ejemplo”.
“Vivimos en un mundo de prisas, estamos abandonando la cocina clásica y se ha triplicado el consumo de procesados en las últimas dos décadas. Y esto es la industria. Pero es que la industria hace lo que demanda el consumidor”, afirma.
Y advierte que a través de la epigenética se sabe que si los padres comen mal, esto se transmite a los hijos mediante cambios en la metilación de los genes y en estudios con ratas se ha observado que «pasa con tres, cuatro y cinco camadas”, apunta.
“Somos responsables -subraya- de lo que va a pasar en los próximos años y, además, con el problema añadido que estamos destruyendo el planeta por culpa de este sistema alimentario que tenemos”.
El ayuno intermitente
Jordi Salas-Salvadó participó hace más de un año en una revisión bibliográfica, publicada en la revista British Journal of Medicine, sobre los estudios relativos al ayuno intermitente y su eficacia para la pérdida de peso y para los factores de riesgo cardiovasculares.
Comparado el ayuno intermitente con una dieta hipocalórica tradicional, “solo encontramos que esta dieta en días alternos tenía un pequeño beneficio” a corto plazo, porque a largo plazo no hay estudios en obesidad.
“Y yo he visto muchos estudios a corto plazo que luego a largo plazo no se reproducen, por ejemplo las dietas muy hipocalóricas que se hacían hace unos años con líquidos o sustitutos de comida”, añade.
Por tanto, respecto a la efectividad en la pérdida de peso a largo plazo “con lo único que tenemos evidencia es con la dieta mediterránea ligeramente hipocalórica”, que es eficaz y segura, concluye el catedrático de la Universidad Rovira y Virgili.
La entrada ¿Tomar fármacos contra la obesidad sin hacer dieta ni ejercicio? Un error con consecuencias se publicó primero en EFE Salud.
-
Newswire1 díaPew financia 7 nuevas colaboraciones en investigación biomédica
-
Newswire1 díaDESCUBRE LA RUTA CARRETERA MÁS AUTÉNTICA Y SORPRENDENTE DE BAJA CALIFORNIA SUR, Fideicomiso de Turismo de Baja California Sur
-
RSE3 díasBruselas quiere acelerar ocho proyectos energéticos «urgentes»
-
RSE3 díasAmetller Origen instala un sistema automático de pago por retorno de botellas
-
Mundo Política3 días
La UE afina este lunes los detalles de una polémica directiva que vincula derechos humanos y protección del medio ambiente
-
Mundo Política3 díasNegociaciones contrarreloj en El Parlamento Europeo para acordar el Marco Financiero Plurianual 2028-2034
-
Newswire2 díasLa Alianza para una IA Inclusiva: una coalición global para construir una IA que sirva a todos, no solo a unos pocos
-
RSE2 díasLa UE se enfrenta al reto de conjugar un transporte por carretera sostenible y económicamente viable
