Connect with us

Ciencia y Salud

¿Qué impacto podría tener para los europeos una reducción del 90% de las emisiones de CO2?

Publicado

el

Bruselas (Euractiv.com/.es) – Es probable que el objetivo climático de la Unión Europea (UE) para 2040 afecte al bolsillo de los europeos, y al de las empresas para las que trabajan.

Que una reducción del 90% de las emisiones de gases de efecto invernadero en Europa respecto a los niveles de 1990 (el objetivo del bloque europeo) suponga costes o beneficios netos para los trabajadores, los hogares y la industria dependerá de cómo decidan los líderes de la UE aplicar esa meta, si es que llegan a acordarla.

El objetivo climático de la UE coincide con el esfuerzo renovado de la Comisión Europea para impulsar la competitividad y reducir los precios de la energía.

En los últimos meses se han multiplicado los llamamientos a dar marcha atrás en políticas históricas como la eliminación progresiva de los coches de gasolina y diésel en 2035, o a debilitar medidas climáticas clave externalizando la acción «verde» a través de créditos internacionales de carbono, o limitando el precio que los contaminadores deben pagar por emitir CO2.

Todo ello a pesar de que cada vez hay más señales claras de que no actuar contra el cambio climático podría acabar costando mucho más  a la UE, además de minar la capacidad de las empresas europeas para aplicar tecnologías más limpias, entre ellas la electrificación, los combustibles sostenibles y la captura y el almacenamiento de carbono.

Aumento de los costes

El transporte es el único sector de la UE en el cual las emisiones han aumentado desde los años noventa.

También es el sector en el que los ciudadanos tienen más probabilidades de sentir de primera mano el coste de la transición ecológica , incluso a pesar de la entrada progresiva al mercado de coches eléctricos más asequibles.

Los viajeros de negocios y los turistas, entre otros, podrían sufrir un incremento de las tarifas aéreas cuando las compañías empiecen a repercutir en los consumidores el coste de las nuevas normas de combustible sostenible para aviones.

La descarbonización total de la aviación europea para 2050 costará 2,4 billones de euros en inversiones, según el grupo de presión Airlines for Europe.

Por su parte, el grupo de ONG Transporte y Medio Ambiente (T&E) advierte de que en 2030 el sector del transporte podría representar hasta el 45% de las emisiones totales de la UE, por lo que su transformación es fundamental para cumplir los objetivos climáticos.

De igual manera, la renovación de las viviendas europeas mal aisladas y la sustitución de las calderas de gas por bombas de calor eficientes tendrán importantes costes iniciales para muchos hogares, a pesar de que esas medidas apunten a reducir las emisiones y a rebajar la factura energética a largo plazo.

El otro lado de la moneda

A pesar de los obstáculos, se prevé que el impulso de la UE a la descarbonización de la energía mediante energías renovables reduzca gradualmente la factura energética y la dependencia del bloque de los combustibles fósiles importados, lo cual podría liberar miles de millones para inversiones estratégicas.

Según T&E, los modelos de la Comisión Europea sugieren que una reducción del 90% reduciría la factura petrolera de la UE entre 75.000 y 100.000 millones de dólares al año.

No actuar, por el contrario, conlleva riesgos económicos indirectos, pero enormes, ante el aumento de la temperatura global.

«En el periodo 2031-2050, el coste acumulado adicional para el PIB de una senda que conduzca a un peor calentamiento global podría ascender a 2,4 billones de euros en la UE, en comparación con los costes de una senda compatible con el objetivo de 1,5 ºC del Acuerdo de París», según explicó la Comisión Europea el año pasado.

En ese sentido, un portavoz de la organización de consumidores paneuropea BEUC explicó a Euractiv que los ciudadanos de la UE ya están pagando el precio de «fenómenos meteorológicos extremos acelerados por el cambio climático».

De las promesas a los hechos

La distribución de los costes y beneficios del objetivo de 2040 dependerá en gran medida de cómo actúe Bruselas y de cómo respondan los gobiernos nacionales .

En ese sentido, ya se han adoptado algunas medidas legislativas esenciales, entre ellas un nuevo precio del carbono para los combustibles de calefacción y transporte.

Para amortiguar el impacto, sobre todo para los hogares con rentas bajas y las pequeñas empresas, la ley incluye un Fondo Social del Clima para reciclar los ingresos y devolverlos a los grupos más vulnerables

No obstante, esta semana 26 de los 27 socios de la UE incumplieron el plazo para presentar los planes nacionales necesarios para activar el fondo.

En términos generales, cualquier retroceso en las políticas climáticas podría desbaratar las señales de precios que estos mecanismos envían al sector privado, frustrando a muchas empresas que ven la transición verde como una oportunidad estratégica, no como una carga.

El riesgo de ser demasiado flexible

Está previsto que la Comisión Europea permita, en principio, el uso de créditos de carbono internacionales para cumplir el objetivo del 90%.

Ello significa invertir en proyectos respetuosos con el clima en el extranjero -entre ellos la plantación de árboles en países en desarrollo- y contabilizar el ahorro de emisiones resultante para el objetivo europeo.

Los defensores de la medida sostienen que así podrían reducirse los costes de la transición ecológica. Sus detractores, entre ellos algunos promotores de la tecnología de captura y almacenamiento de carbono y defensores del medio ambiente muy escépticos, aseguran que socavaría los incentivos para reducir las emisiones en Europa y retrasaría el desarrollo de tecnologías limpias en general.

«La industria europea de tecnologías limpias obtiene los mayores beneficios cuando las inversiones de la UE en clima se realizan en Europa y no en el extranjero. ¿Por qué vamos a externalizar los beneficios que aporta la transición energética a países de fuera de la UE?», se preguntó el diputado socialista Mohammed Chahim (S&D).

Por su parte, Thomas Gelin, de la ONG ecologista Greenpeace, también comparte esa opinión.

///

(Editado por Euractiv.com y Fernando Heller/Euractiv.es)

The post ¿Qué impacto podría tener para los europeos una reducción del 90% de las emisiones de CO2? appeared first on Euractiv.es.

Seguir leyendo

Ciencia y Salud

TRIBUNA | Cuando la diarrea crónica no es solo un efecto secundario

Publicado

el

diarrea crónica

La especialista recalca en su tribuna para EFEsalud que la diarrea crónica afecta a la calidad de vida pero que si esa patología tiene un origen, como la malabsorción de ácidos biliares (MAB), puede tratarse de forma efectiva si se cuenta con un diagnóstico correcto.

La doctora Maite Herráiz es especialista en aparato digestivo y directora del Departamento de Digestivo en la Clínica Universidad de Navarra, donde también lidera la Unidad de Prevención y Consulta de Alto Riesgo de tumores digestivos.

Con una sólida formación académica y una amplia experiencia clínica, combina la atención a pacientes con funciones docentes y de investigación, lo que le ha permitido impulsar proyectos innovadores en el ámbito de las enfermedades digestivas funcionales y los efectos secundarios gastrointestinales del tratamiento oncológico.

Reconocida por su capacidad de integrar asistencia, innovación y docencia, docotora Herráiz colabora activamente en sociedades científicas nacionales e internacionales y ha sido presidenta de la Sociedad Española de Endoscopia Digestiva, donde trabajó para potenciar el papel de la mujer en el ámbito científico y fomentar vínculos con entidades europeas y latinoamericanas.

Cuando la diarrea crónica no es solo un efecto secundario

Doctora Mª Teresa Herráiz Bayod, directora del Departamento de Digestivo de la Clínica Universidad de Navarra

Durante semanas, incluso meses, muchas personas llegan a convivir con un síntoma que puede alterar su vida cotidiana, limita sus rutinas y mina su bienestar físico y emocional: la diarrea crónica.

A menudo se minimiza, se atribuye al estrés, a una mala digestión o —en el caso de pacientes con cáncer— a los efectos secundarios inevitables del tratamiento. Pero, en muchos casos, la diarrea persistente tiene una causa concreta, identificable y tratable que suele pasar desapercibida, esto es, la malabsorción de ácidos biliares.

Hablamos de diarrea crónica cuando persiste durante más de cuatro semanas.

diarrea crónica
La directora del Departamento de Digestivo de la Clínica Universidad de Navarra, Maite Herráiz. Foto cedida

Aunque pueda parecer un síntoma menor, su impacto es significativo, ya que afecta al 3-7 % de la población general, y mucho más a personas que han recibido tratamientos oncológicos.

Más allá de la incomodidad, puede condicionar por completo el día a día, ya que obliga a conocer de memoria la ubicación de los baños, impide planificar salidas o viajes y, en casos graves, genera incontinencia o pérdida de peso.

El problema es que muchas veces se normaliza. Algunos pacientes se resignan, y otros, especialmente los que ya han atravesado un cáncer, tienden a considerarlo “parte del proceso”, pero no lo es ya que cuando esa patología tiene un origen como la malabsorción de ácidos biliares (MAB), puede tratarse de forma efectiva si se cuenta con un diagnóstico correcto.

La malabsorción de ácidos biliares ocurre cuando el intestino no logra reabsorber de manera adecuada las sales biliares que el hígado fabrica para digerir las grasas. Como resultado, estas sustancias llegan al colon, donde provocan una secreción excesiva de agua y electrolitos que deriva en diarrea acuosa, a menudo urgente y difícil de controlar, la Diarrea por Ácidos Biliares (DAB).

Aunque puede aparecer en personas sin patología previa, es más común en quienes han recibido radioterapia abdominal o pélvica, han sido sometidos a determinadas cirugías digestivas (como la resección del íleon) o han tomado ciertos fármacos oncológicos. En muchos casos, la DAB no aparece de inmediato, sino meses o incluso años después del tratamiento.

Sabemos que entre un 40 % y un 50 % de los pacientes tratados con radioterapia pélvica desarrollan diarrea crónica y, en la mayoría de estos casos, la causa es la DAB. Sin embargo, este diagnóstico se pasa por alto con frecuencia porque se asume como un daño colateral inevitable, cuando en realidad, identificar su origen puede cambiarlo todo.

Una DAB no tratada de forma adecuada puede tener consecuencias importantes sobre la salud del paciente ya que, además de mermar la calidad de vida, puede provocar desnutrición, alteraciones metabólicas e incluso llevar a suspender o reducir tratamientos oncológicos que son eficaces.

Y lo más grave es que muchos pacientes pasan por numerosas pruebas, dietas restrictivas o tratamientos que no llegan a abordar el problema de raíz.

Frente a esta situación, existe una prueba diagnóstica funcional específica que puede confirmar o descartar con alta precisión la DAB. Se trata de una gammagrafía que mide cuánta pérdida de ácidos biliares tiene el paciente en siete días.

Es sencilla, bien tolerada y con una exposición mínima a radiación y, a diferencia de otras pruebas, permite cuantificar la malabsorción y clasificarla como leve, moderada o severa, algo muy válido a la hora de orientar el tratamiento. Frente a la opción de probar tratamientos “a ciegas”, esta técnica aporta claridad y evita sobrecargar al paciente con fármacos o pruebas innecesarias.

Contar con este tipo de herramientas no solo ahorra tiempo, sino también incertidumbre, gastos innecesarios y malestar para el paciente. En muchos casos, un tratamiento basado en secuestradores de ácidos biliares o una pauta dietética personalizada es suficiente para revertir los síntomas y recuperar la calidad de vida.

En salud, ponerle nombre a lo que ocurre es el primer paso para poder actuar. La DAB no es una rareza y no debería seguir escondida tras diagnósticos inespecíficos como el síndrome del intestino irritable o un efecto secundario más del tratamiento.

Necesitamos hablar más de ella, que sea incorporada a los protocolos diagnósticos y formar a los profesionales que, día a día, atienden a estos pacientes. Especialmente en el caso del paciente oncológico, detectar y tratar adecuadamente la diarrea crónica es una gran necesidad. No se trata solo de controlar un síntoma, sino de cuidar su recuperación, su dignidad y su bienestar.

La entrada TRIBUNA | Cuando la diarrea crónica no es solo un efecto secundario se publicó primero en EFE Salud.

Seguir leyendo

Ciencia y Salud

Seis ejercicios frente a la menopausia sin salir de casa

Publicado

el

ejercicios menopausia

La profesora de los Estudios de Ciencias de la Salud de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), Marta Massip Salcedo, que aconseja hacer estos ejercicios durante la menopausia, explica que una de las funciones de los estrógenos es ayudar a mantener la sensibilidad a la insulina.

Al disminuir los estrógenos durante la menopausia, el cuerpo tiende a volverse más resistente a la insulina. “Esta resistencia puede llevar a un aumento de la glucemia y a una mayor tendencia a acumular grasa abdominal, un tipo de grasa particularmente asociado al riesgo cardiovascular”, aclara.  

La falta de actividad física dificulta que el cuerpo controle los niveles de azúcar en sangre. “Esto puede favorecer el desarrollo de diabetes de tipo 2, el aumento del colesterol ‘malo’ (LDL), una pérdida del colesterol ‘bueno’ (HDL) y una subida de la presión arterial, lo que eleva el riesgo de enfermedades del corazón y accidentes cerebrovasculares”, precisa la experta.

“Por eso, -añade- durante la menopausia, es sumamente importante adoptar hábitos de vida saludables que ayuden a mejorar la sensibilidad a la insulina y a reducir el riesgo cardiovascular, como, por ejemplo, cuidar la alimentación y hacer ejercicio”.

Massip Salcedo señala que en esta etapa es común ganar peso y perder masa muscular, especialmente si se lleva una vida sedentaria. 

Ejercicios menopausia
EFE/Brais Lorenzo

Además, con la menopausia las mujeres también experimentan cambios en su estado de ánimo, como tristeza, ansiedad o cambios de humor, y el ejercicio es un aliado que ayuda a mejorar el bienestar emocional. 

Ejercicios para mejorar la salud durante la menopausia 

Es fundamental buscar momentos para moverse. Pequeñas dosis de ejercicio o “snacks”, como los denomina la experta en una nota de prensa, ayuda a “activar los músculos, mejorar la circulación, mantener el metabolismo activo y controlar el azúcar en sangre, además de mejorar la energía y la concentración”.

La profesora de la UOC nos ofrece seis ejemplos de ejercicios cotidianos:

  • Subir y bajar escaleras durante un par de minutos.
  • Hacer varias series de sentadillas. Se pueden utilizar pesas durante las sentadillas para trabajar la fuerza. 
  • Caminar rápido por casa.
  • Hacer saltos suaves, como por ejemplo, salto a la comba.
  • Realizar series de flexiones apoyándose en un mueble.
  • Hacer varias series de ponerse de puntillas.

Es recomendable hacer estos ejercicios cada hora y durante un tiempo entre 1 y 5 minutos. Se pueden combinar o hacer uno solo cada vez. 

La entrada Seis ejercicios frente a la menopausia sin salir de casa se publicó primero en EFE Salud.

Seguir leyendo

Ciencia y Salud

Muere de cáncer la actriz Verónica Echegui, de 42 años

Publicado

el

Verónica Echegui

La muerte de Verónica Echegui se produjo ayer domingo pero no se ha conocido públicamente hasta esta mañana cuando la Unión de Actores y Actrices lo ha comunicado en sus redes sociales.

La capilla ardiente está instalada en el Tanatorio de la Paz (Alcobendas), donde mañana a mediodía será incinerada en una ceremonia íntima.

La trayectoria de Verónica Echegui en el cine

Verónica Echegui, nacida en Madrid en 1983, estuvo cuatro veces nominada al Goya y se dio a conocer por su papel de la Juani en la película de Bigas Luna de 2006.

Con medio centenar de títulos como actriz en su trayectoria, su primer Goya lo ganó por su debut como directora con el corto de ficción ‘Tótem Loba’ (2021).

‘Yo soy la Juani’ (2006) le valió su primera candidatura al premio de la Academia de Cine de España como actriz revelación y volvió a estar nominada como actriz protagonista por ‘El patio de mi cárcel’ (2008), de Belén Macías, y por ‘Katmandú, un espejo en el cielo’ (2011), de Icíar Bollaín, por la que la actriz madrileña sí obtuvo el premio Gaudí.

Verónica Echegui
La actriz Verónica Echegui en la presentación del corto “Estepas”, en la 70 edición del Festival de Cine de San Sebastián en 2022. EFE/Juan Herrero.

Además, su papel en ‘Explota, explota’ (2020) le valió una cuarta nominación, esta vez como actriz de reparto.

Verónica Echegui también ha trabajado en películas como ‘Tocar el cielo’ (2007), de Marcos Carnevale; ‘8 citas’ (2008) de Peris Romano y Rodrigo Sorogoyen; ‘La casa de mi padre’ (2008) de Gorka Merchant; ‘La gran familia española’ (2013), de Daniel Sánchez Arévalo, y ‘Kamikaze’ (2014).

La última producción que estrenó fue la serie ‘A muerte’ (2025), comedia romántica de Atresmedia dirigida por Dani de la Orden, donde hizo el papel de Marta, implicada en una relación de dos treintañeros que no están en su mejor momento.

Además, deja pendiente de estreno ‘Ciudad de sombras’, una serie policíaca para Netflix dirigida por Jorge Torregrosa y que adapta la primera novela de Aro Sániz de la Maza de la tetralogía de ‘Milo Malart’, publicada por Destino.

La serie, de seis episodios, se rodó el pasado otoño/invierno en Barcelona, protagonizada por Isak Férriz en la piel del inspector Malart y con Echegui como la subinspectora Rebeca Garrido.

La entrada Muere de cáncer la actriz Verónica Echegui, de 42 años se publicó primero en EFE Salud.

Seguir leyendo

Más Leidas