El mouse es una herramienta fundamental en el uso del computador. Pero es uno de los detonantes de enfermedades como el síndrome del túnel carpiano, que se generan por las largas horas de trabajo o de juego. Como solución, las marcas ofrecen un dispositivo con un diseño vertical.

Este tipo de ratón se usa de forma similar a uno tradicional, pero la manera da sujetarlo es la clave de su diseño y lo que permite dar el punto diferencial en su comodidad. Aunque, como sucede con cualquier otro dispositivo, hay ciertas consideraciones a tener en cuenta.

Este concepto no es algo nuevo, en 1994, Jack Lo inventó este diseño buscando una manera diferente de usar el mouse. Pero casi 25 años después esta idea tomó fuerza, siendo una alternativa que las marcas cada vez más incluyen en su catálogo de productos.

El ratón vertical fue pensado inicialmente como una solución para las personas que sufren de dolor de muñeca y la mano, por lo que brinda una posición más cómoda.

Usualmente, un mouse se usa con la mano de forma paralela al escritorio, obligando a levantar ligeramente la muñeca y hacer fuerza para su movimiento. Una actividad que se hace cotidiana, pero con el tiempo genera cansancio y dolor.

La diferencia con el diseño vertical es que el usuario ubica el brazo en posición de descanso en el escritorio y la mano como si estuviera haciendo un saludo, con un agarre más ergonómico.

Esta es la diferencia entre un mouse y otro. El resto de funciones son iguales, con dos botones principales para hacer clic derecho e izquierdo y una rueda para el scroll en pantalla. Aunque esto requiere un tiempo para acostumbrarse, en esencia es igual y ambos dispositivos son compatibles con cualquier programa o actividad.

Antes de escoger qué mouse vertical es importante evaluar si un ratón de este tipo es pertinente.

Dentro de sus ventajas está la comodidad y el descanso que genera frente al mouse tradicional, especialmente para aquellas personas con dolores o síndrome del túnel carpiano. Otra ventaja es que el movimiento no depende de la muñeca sino del brazo, por lo que no todo recaerá en esa parte del grupo que es la más afectada.

Algunos puntos en contra es que la mayoría de estos dispositivos son inalámbricos, por lo que se necesitará de baterías o pilas. También es importante tener presente que son accesorios más costos y que el tiempo para acostumbrarse a manejarlos es más amplio, por lo que a algunos usuarios les puede costar.

Para elegir un ratón vertical entre la gran variedad de opciones hay que tener en cuenta factores como estos:

– Tipo de uso: algunos dispositivos tienen botones adicionales, que permiten personalizar la experiencia con funciones adicionales. Mientras que otros se limitan a los botones básicos. La elección dependerá de qué tan necesario sean esas opciones adicionales.

– Tipo de agarre: si bien la mayoría de mouse verticales tienen un diseño de L inclinada, algunos cuentan con una ergonomía mucho más pronunciada, que hacen que la mano este más o menos abierta. Esto también afectará el peso del dispositivo.

– Conectividad: la mayoría de mouse verticales son inalámbricos, pero algunos se conectan vía USB y otros Bluetooth. Así que dependerá de qué es más cómodo para cada usuario y que tipo de conectividad funciona mejor en cada PC.

– Precio: en el mercado hay ratones desde los 20 dólares hasta los 100. Su valor irá incrementando según las funciones adicionales, tipo de conectividad, diseño, marca y antigüedad.