El hallazgo de preservativos usados y de un kit de lencería erótica en el departamento de un piso sexto del barrio porteño de Retiro, desde donde cayó al vacío la modelo brasileña Emmily Rodrígues, es uno de los principales argumentos con los que la familia de la víctima sostiene convencida que el imputado Francisco Sáenz Valiente y las tres testigos mintieron al declarar que no hubo sexo aquella madrugada fatal.

“El hallazgo de un preservativo usado en el lugar del hecho en principio contradice o descarta las versiones del propio imputado y de sus amigas, quienes manifestaron que esa noche no hubo ninguna actividad sexual”, dijo a Agencia Télam Ignacio Trimarco, el abogado que representa a los padres de Emmily en el expediente.

El letrado hizo referencia a los testimonios que brindaron a la causa las otras tres mujeres que a lo largo de la madrugada del 30 de marzo estuvieron en el departamento del empresario minero y del agro detenido por el caso y que fueron su amiga argentina Lía Figueroa Alves -la primera en retirarse cuando vio alterada a Emmily-, la cubana Dafne Santana -quien también se retiró antes de que su amiga cayera al vacío-, y la médica brasileña Juliana Magalhaes Mourao -única testigo presencial de la muerte de la joven modelo-.

“Si las testigos que se fueron antes, es decir Lía y Dafne, no vieron ninguna actividad sexual deberíamos entender que cuando quedaron Francisco y Juliana fue cuando se usó ese preservativo y surge el interrogante de si esto fue así, por qué no lo relataron ni en su testimonial ni en su indagatoria”, cuestionó el abogado.

Trimarco recordó que la víctima cayó al vacío “completamente desnuda” y remarcó que todo este análisis abre la hipótesis que a Emmily “le hayan suministrado drogas, que hayan intentado abusar de ella sexualmente y que en algún momento ella se resistió y ahí comenzó su ataque de furia, nervios y excitación donde pidió ayuda a la policía y, en función de eso, se produce su muerte”.

En ese sentido, el abogado recordó que este caso debe tratarse bajo “el protocolo de investigación de la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), que indica que en toda investigación de la muerte violenta de una mujer, se considerará la posibilidad de que haya habido una violencia sexual anterior o posterior a la muerte”.

Por su parte, la defensa de Francisco Sáenz Valiente solicitó este lunes la falta de mérito y la inmediata libertad del empresario al considerar que hay una “inexistencia de una conducta homicida” por parte del acusado y que no existen motivos para suponer que el imputado pueda “obstaculizar” la investigación.

La presentación fue realizada por los abogados defensores Rafael Cúneo Libarona y Gustavo Facundo Orazi ante el juez de la causa, Martín Del Viso, del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 31, quien deberá resolver si hace lugar o no al planteo por el cual permanece detenido el empresario por los delitos de “homicidio agravado por femicidio, suministro de estupefacientes y tenencia ilegal de un arma de guerra de uso civil condicional”.

En el escrito de 65 fojas presentado por los letrados, repasan detalles de cómo se fue desarrollando la noche y la madrugada que precedió a la muerte de Emmily. Allí, de acuerdo a la declaración de todos los testigos, en el departamento de Retiro continuaron consumiendo “libremente, sin presión, exhortación o engaño, diversas sustancias estupefacientes, como marihuana, THC desde un vapeador, cocaína, tuci y, además, alcohol”.

Los defensores aseguraron -en base al testimonio de las testigos- que se trató de “una reunión social” y que no hubo “ninguna insinuación de índole sexual”. ”Cada uno de los invitados tuvo la libertad de elegir consumir alguna sustancia o no, y en su caso la cantidad que quisieran. Todas eran personas adultas, con experiencia previa en sustancias y con total libertad”, señala uno de los puntos elaborados por la defensa en su pedido de falta de mérito para Sáenz Valiente.

Además, resaltaron que la víctima sufrió un “brote” cerca de las 8.15 de la mañana del 30 de marzo “el cual fue advertido y sufrido por Lía Figueroa Alves y por Juliana Magalhaes Mourao, además de Sáenz Valiente” y que por ese motivo, Figueroa Alves se retiró a su domicilio. También hicieron mención a los “reiterados intentos (del imputado) de calmar a Rodrigues a través de la palabra y de la contención física”, e hicieron hincapié en que se realizaron 6 llamados a teléfonos de emergencias, dos de ellos efectuados por el empresario y otros cuatro por Magalhaes Mourao. Finalmente, señalaron que la autopsia realizada al cuerpo de la modelo brasileña “no se detectaron daños compatibles con una agresión previa a la caída, ni signos de violencia sexual, como tampoco heridas defensistas”.

Este martes vence el plazo para que el juez Del Viso resuelva la situación del empresario. Debe decidir si lo procesa, si lo sobresee o si le dicta una falta de mérito en la que recuperaría la libertad pero continuaría bajo investigación.

Con información de Agencia Télam.

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