La Fundación Naturaleza y Hombre (FNYH) impulsa el proyecto Club de Fincas en la Dehesa del Oeste Ibérico, con el objetivo de salvaguardar los extraordinarios valores naturales del Oeste Ibérico, en una iniciativa que conecta a propietarios privados en torno a una visión compartida: conservar y mejorar la funcionalidad ecológica de las dehesas mediante la cooperación.

A través de esta red se fortalece la conectividad entre fincas, un elemento clave en paisajes mediterráneos donde el movimiento de fauna y la continuidad de hábitats permiten sostener la diversidad biológica y la estabilidad del sistema. Los acuerdos de incorporación al Club se formalizan bajo el marco de la custodia del territorio, instrumento que articula una gobernanza compartida y flexible entre la entidad de custodia y los propietarios.

Este modelo genera seguridad jurídica, impulsa la corresponsabilidad y asegura que las decisiones de gestión se mantengan coherentes a largo plazo. La custodia del territorio, aplicada en finca privada, es una herramienta fundamental para garantizar la persistencia de la dehesa, ya que promueve prácticas sostenibles que respetan la estructura ecológica y social del paisaje.

Desde febrero de 2024, el proyecto ha alcanzado avances significativos

Actualmente, el Club integra más de 10.000 hectáreas distribuidas en áreas de alto valor ecológico como Arribes del Duero, Campo de Azaba, Campo de Argañán, Sierra de Gata y Valle de las Pilas, Sierra de San Pedro, Canchos de Ramiro y Ladroneras, y Monfragüe. Esta escala de trabajo permite una intervención coordinada que evita la fragmentación, refuerza la conectividad ecológica y aumenta la resiliencia del territorio frente a amenazas emergentes.

En los hábitats acuáticos, se han construido 8 charcas nuevas y restaurado 12 estanques, generando puntos clave de biodiversidad. Estas actuaciones, además de favorecer a los odonatos —con 28 especies registradas— aportan refugio y alimento a múltiples especies, aumentan la disponibilidad de agua y refuerzan microhábitats esenciales en periodos de sequía.

La siembra de vegetación asociada como juncos y carrizales y la instalación de islas de corcho incrementan la heterogeneidad estructural del medio, beneficiando a galápagos, anfibios, reptiles y aves como la cigüeña negra. La retirada de invasoras y la mejora de vallados aseguran la estabilidad ecológica de estos sistemas acuáticos, que son el corazón de la biodiversidad en la dehesa.

En la parte terrestre, se ha trabajado en la creación de mosaicos ecológicos que diversifican el paisaje. Se han instalado cercados para conservar pastos y proteger el regenerado natural, favorecido siembras y reforzado la presencia de arbustos clave. Asimismo, se han implantado 5 km de plantaciones lineales con especies vegetales que atraen y sostienen mariposas, contribuyendo a la conservación de lepidópteros y de su flora asociada. Las podas de conservación en unas 50 hectáreas recuperan prácticas tradicionales de manejo, mejoran la salud de las encinas y reducen riesgos asociados a incendios o enfermedades.

Colaboración con la Universidad de Salamanca

La colaboración con la Universidad de Salamanca ha permitido avanzar en la comprensión científica del estado y funcionamiento de la dehesa. Se han desarrollado tratamientos experimentales contra la seca, estudiado el flujo de carbono en diferentes modelos de gestión y analizado procesos de decaimiento en especies del género Quercus. Este conocimiento, basado en observación y análisis riguroso, es esencial para diseñar estrategias eficaces que aseguren la persistencia de encinares y alcornocales, elementos vertebradores del ecosistema de dehesa.

La Fundación Internacional de Investigación del Clima (FIC) ha generado escenarios climáticos futuros que permiten anticipar la respuesta de las plantaciones realizadas y de diversas especies de flora y fauna frente al cambio climático. Esta modelización aporta herramientas valiosas para planificar con visión de futuro, seleccionar especies más resilientes y adaptar la gestión a un contexto climático cada vez más incierto.

Como parte de la estrategia de bioeconomía, se ha creado un sello de calidad respetuoso con la biodiversidad para la producción del cerdo ibérico. La plataforma DEHESA SOSTENIBLE —que incluye una tienda física en Madrid— ha potenciado la comercialización de productos, ofreciendo visibilidad y valor añadido a los productores que apuestan por prácticas responsables.

Hoteles de insectos, creación de charcas y un plan de educación

Además, se ha reforzado su compromiso mediante la instalación de hoteles de insectos, refugios para anfibios y reptiles, creación de charcas y el desarrollo de un plan para un centro de educación ambiental. Este enfoque integra conservación y economía, demostrando que la dehesa puede gestionarse de forma rentable sin comprometer sus valores naturales. La educación ambiental ha sido un pilar transversal del proyecto.

Las actividades con propietarios, habitantes locales y escolares han superado ampliamente los objetivos previstos: seis voluntariados, más de veinte talleres, dos webinars y presencia constante en ferias, congresos y eventos comunitarios. La difusión en medios de comunicación ha reforzado el alcance del mensaje, sensibilizando y fortaleciendo el vínculo de la sociedad con la dehesa llegando a tener indicadores hasta de 300% de logros alcanzados. Involucrar a personas de diferentes edades y contextos asegura que la conservación perdure en el tiempo y se convierta en un compromiso colectivo.

La dehesa es un legado vivo, una obra silenciosa construida durante siglos entre la mano humana y la naturaleza. Hoy, su conservación exige más que admiración: requiere acción, colaboración y visión de futuro. Cada finca que se suma, cada productor que cambia una práctica, cada niño que aprende su valor, es un paso hacia la permanencia de este paisaje único. La dehesa no solo es un ecosistema; es memoria, identidad y promesa. Cuidarla es un acto de responsabilidad y herencia hacia quienes aún no han nacido.

La reserva biológica Campanarios de Azaba (Salamanca) celebró el pasado 5 de diciembre un encuentro de propietarios y productores donde se entregaron algunos reconocimientos, como a Vieru de la almazara AsPontis el cual ha sido uno de los productores más comprometidos, ha realizado voluntariados, construido hoteles de insectos, ha desarrollado muchas alternativas y prevé construir un aula de naturaleza y un muladar.

Distinciones y reconocimientos

Asimismo a la empresa Embutidos de la Encina charra también se le ha entregado una distinción, ya que ha desempeñado un papel fundamental en apoyo al proyecto mediante restauración de charcas, construcción de refugios para anfibios y reptiles, además de diversas actividades de educación ambiental y comercialización.

En cuanto a los propietarios, se le tributó un reconocimiento al monte público de Hernan Pérez (provincial de Cáceres) por sus contribuciones en más de 500 hectáreas a conservar la dehesa, con actuaciones tales como la creación de 8 charcas, levantamiento de cercones, plantaciones y múltiples monitoreos, además talleres de educación ambiental e investigaciones.

El segundo propietario reconocido es el Arenal de la Hermita de San Pedro en la sierra cacereña  de San Pedro, un productor que ha dejado de usar ibermetrina en su explotación de alrededor de 2000 hectáreas, ha creado un muladar para la alimentación de rapaces y ha vinculado su producto “la chanclona” de embutido.

Por último, también se reconoció la labor de Maria Jesús, del centro de interpretación de la Sierra de Gata por sus contribuciones a salvaguardar el legado cultural de este enclave.

Más información: https://dehesasostenible.com/

Hay que recordar que Club de Fincas en la Dehesa del Oeste Ibérico cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia (PRTR) financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.

Haz clic para ver el pase de diapositivas.

La entrada El Club de Fincas, un ejemplo para sostener la diversidad biológica del Oeste Ibérico se publicó primero en EFE Comunica.

Valencia será la sede, este jueves 11 de diciembre, del IV Encuentro Internacional RENOWAGRO, un evento del sector agroalimentario que en esta edición debatirá sobre cómo obtener una rentabilidad económica, ambiental y social de forma sostenible a través de la innovación.

Así pues, en el Palau de les Arts de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, se congregarán alrededor de un millar asistentes procedentes de todo el mundo, según las estimaciones de sus organizadores Fertinagro Biotech, Térvalis y la Cátedra Universitaria Fertinagro sobre Biotecnología Agrícola.

En la sesión inaugural estará la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades de España, Diana Morant, junto con el rector de la Universidad Politécnica de Valencia, José E. Capilla Romà.

RENOWAGRO que abarcará todos los ángulos de la industria

A partir de ahí se desarrollarán diferentes actividades para un total de 14 ponencias y mesas redondas que tratarán temas como la política de innovación de la Unión Europea, la Política Agraria Común (PAC) y su impacto en la agricultura española o asuntos más transversales como el nexo entre suelo y salud humana.

En la jornada matutina destacan las intervenciones del profesor de Suelos y Geología en la Southern Illinois University (Estados Unidos), Eric Charles Brevik; del jefe de departamento en Gembloux Agro-Bio Tech de la Université de Liège (Bélgica), Patrick du Jardin, o de la profesora en la Universidad Politécnica de Madrid, Elena Caro Bernat.

Por la tarde, los principales temas versarán sobre transformación digital en la industria agroalimentaria, el potencial de la innovación para la reducción de costes en la producción agrícola y en lo que se conoce como ‘Agricultura 5.0’, que se define como la evolución hacia un campo que integre IA, IoT, robótica y análisis de datos.

En esta sesión algunos de los participantes serán el presidente del Consejo Europeo de COPA-COGECA, Massimiliano Giansanti, junto con el vicepresidente de esta misma organización y también presidente de ASAJA, Pedro Barato.

El estado del sector en España

Para clausurar la cuarta edición de RENOWAGRO, la directora de Proyectos de Fundación Térvalis, Elena Utrilla Tresaco, ofrecerá una conferencia titulada ‘Innovación y Autonomía: Un Enfoque Inclusivo’.

Los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación reflejan que, en España, el valor de la producción de la rama agraria alcanzó en 2024, último año con datos completos, su valor histórico más alto con 68.430 millones de euros, derivado del incremento de las cantidades producidas (+11 % respecto a 2023) y la bajada de precios (6 %). EFE

La entrada El cuarto encuentro RENOWAGRO pone el foco en la rentabilidad sostenible de la industria se publicó primero en EFE Comunica.

Bruselas (Euractiv.com.es) – El transporte por carretera se ha convertido en una prueba de resistencia para la credibilidad de Europa, al tiempo que los esfuerzos del bloque comunitario por reducir las emisiones de C02 entran en una fase decisiva. Se trata del único sector en el cual las emisiones contaminantes aumentan a pesar de que la electricidad, los edificios y la industria se mueven gradualmente a la baja.

La mayoría de los turismos y casi todos los camiones siguen funcionando con combustibles fósiles y, con una vida útil de más de una década, cada año de retraso determina el perfil de emisiones de la década de 2030. El riesgo ya no es simplemente no alcanzar los objetivos, sino quedar atrapados en una década de contaminación adicional con consecuencias a largo plazo para el resto de sectores de la economía.

El impulso a la electrificación

En ese sentido, una nueva evaluación del ciclo de vida realizado por el Consejo Internacional de Transporte Limpio (ICCT) concluye que los turismos eléctricos vendidos en la UE ya superan en emisiones a los vehículos de gasolina y diésel, incluso si se tiene en cuenta la fabricación y el mix eléctrico actual.

A medida que el sector energético se descarboniza, la ventaja aumenta, lo que convierte a los vehículos eléctricos en una inversión más sólida a largo plazo tanto para los consumidores como para la industria y los gobiernos.

En el transporte de mercancías, tradicionalmente considerado el segmento más difícil de transformar, los aspectos económicos están cambiando con la misma rapidez. Un estudio sobre el coste total de propiedad muestra que los camiones eléctricos de baterías serán competitivos con los diésel en muchas rutas durante esta década, especialmente si se tienen en cuenta el combustible, el mantenimiento y la recarga en las comparaciones de costes. Lo que antes parecía tecnológicamente lejano se ha convertido en una realidad del mercado a corto plazo.

Por otro lado, otros trabajos académicos subrayan que los camiones de emisiones cero son técnicamente viables y comercialmente aprovechables. En las operaciones de larga distancia, los camiones eléctricos de batería y los de pila de combustible de hidrógeno pueden competir con los diésel tanto en emisiones durante su vida útil como en costes, siempre que cuenten con la infraestructura adecuada.

Reforzar el sistema energético

En ese sentido, investigaciones recientes sugieren que la electrificación aporta beneficios más allá del sector del transporte. Un estudio de modelización para 2025 que abarca 33 países europeos concluye que la electrificación total del transporte terrestre es óptima en términos de costes incluso sin limitaciones climáticas estrictas.

Coordinando la recarga de los vehículos eléctricos con la producción de energías renovables, Europa puede reducir la necesidad de almacenar baterías estacionarias y disminuir los costes de los sistemas energéticos. Los autores del estudio calculan que la flexibilidad del vehículo podría minimizar las inversiones necesarias para estabilizar la red.

A menudo se ignora la interdependencia entre las políticas de transporte y electricidad. La movilidad eléctrica no sólo depende de un sistema energético limpio, sino que contribuye activamente a crearlo. Con la expansión de la energía eólica y solar, la recarga de vehículos eléctricos se convierte en un instrumento para equilibrar la demanda e integrar la generación variable, una ventaja del sistema que los vehículos de combustión interna no pueden ofrecer.

Los costes del retraso

Otro análisis de la misma comunidad de investigadores pone de relieve los riesgos de ir demasiado lentos. El estudio concluye que posponer la electrificación a gran escala podría aumentar los costes de todo el sistema en cerca de 126.000 millones de euros al año, al trasladar la carga de la descarbonización a los edificios, la industria y la agricultura.

Esos sectores se verían obligados a compensar las reducciones no logradas en el transporte por carretera, lo que crearía tensiones políticas y exigiría intervenciones mucho más contundentes más adelante.

Las instituciones de la Unión Europea (UE) también han expresado su preocupación por el ritmo de la transición. El Tribunal de Cuentas Europeo ha advertido en un informe sobre la recarga de vehículos eléctricos que la infraestructura está «desigualmente desplegada» en los Estados miembros, lo que complica los desplazamientos transfronterizos y socava los objetivos climáticos de la UE.

Por otra parte, la Agencia Europea de Medio Ambiente señala que las emisiones del transporte siguen aumentando, a pesar de las reducciones en el resto de sectores importantes, lo cual refuerza la urgencia de un cambio estructural.

En resumen, esas conclusiones sugieren que la indecisión es muy perjudicial: aumenta los costes, debilita la estrategia industrial de Europa y se corre el riesgo de aumentar las diferencias entre los Estados miembros.

Acelerar la electrificación

La investigación apunta en una dirección clara: Europa no carece de tecnologías, vías o justificación económica para descarbonizar el transporte por carretera: falta adaptar la aplicación de las políticas a las pruebas científicas y económicas.

La electrificación se tiene que acelerar en paralelo al despliegue a gran escala de la infraestructura de recarga, especialmente para los vehículos pesados. La aplicación nacional de la normativa de la UE, incluidas las nuevas normas de CO2 y el Reglamento sobre infraestructuras de combustibles alternativos, determinará si la transición tiene éxito o se estanca.

Al mismo tiempo, la política de transportes no puede centrarse únicamente en los vehículos. La planificación urbana, el transporte público y las inversiones en movilidad activa son esenciales para reducir la demanda y mejorar la accesibilidad. Los estudios demuestran que la electrificación, aunque necesaria, no conseguirá por sí sola la reducción de emisiones para 2030.

Europa se enfrenta a una elección estratégica. Las pruebas hasta la fecha apuntan a una vía tecnológicamente madura, económicamente racional y  beneficiosa, siempre que se acelere el ritmo. Si la UE aprovecha esta oportunidad, no sólo determinará su futura política climática, sino también su competitividad, seguridad energética y cohesión social en los próximos años, según los expertos.

///

(Editado por BM/Euractiv.com y Fernando Heller/Euractiv.es)

The post La UE se enfrenta al reto de conjugar un transporte por carretera sostenible y económicamente viable appeared first on Euractiv.es.