Connect with us

Ciencia y Salud

Navidades veganas, un punto de inflexión más allá de la mesa

Publicado

el

navidades veganas

“Para nosotros las navidades son fechas un poco especiales porque no sabes con lo que te vas a encontrar, no solo en las comidas sino también en las conversaciones y eso es algo que queremos evitar”, relata a EFEsalud Laura Jiménez, miembro de la Unión Vegetariana Española (UVE) y fiel al veganismo desde hace once años.

Laura comenta que hay personas veganas que deciden pasar las navidades con su círculo más cercano y no someterse a las preguntas clásicas acerca de la alimentación porque se sienten “en el punto de mira”.

La alimentación de los veganos se centra en vegetales, frutas, legumbres, pastas, arroces y análogos de carnes y pescados.

navidades naveganos
EFE/ Villar López

El enfoque nutricional de unas navidades veganas

La endocrinóloga Ana Isabel Sánchez Marcos, miembro de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), explica que las frutas y verduras son ricas en mucho elementos beneficiosos como vitaminas y minerales (vitamina C, vitamina E, vitamina A, ácido fólico, potasio, magnesio…), fibra y otras sustancias bioquímicamente activas (licopeno, polifenoles…).

“Pero en el contexto de una dieta -apunta-, es el patrón alimentario, el conjunto de todos los alimentos que se ingieren, como se cocinan y combinan entre sí y en qué proporciones y si, de forma global, cubren las necesidades diarias del individuo para que no presente carencias lo que hace que ese patrón pueda considerarse o no saludable”.

Además, un consumo de vegetales variados (unos 30 vegetales distintos a la semana) se ha relacionado con una composición de la microbiota más saludable, lo que reporta beneficios adicionales en salud.

Las personas veganas deben suplementarse diaria o semanalmente con vitamina B12 ya que esta se encuentra casi exclusivamente en productos de origen animal.

“Su deficiencia puede pasar desapercibida en personas que siguen una dieta vegana, ya que esta es rica en folato, que puede enmascarar la deficiencia de vitamina B12. Es importante que los veganos consideren el consumo de suplementos vitamínicos, cereales enriquecidos con vitaminas u otros alimentos fortificados”, indica la doctora.

Un menú navideño nada aburrido

Un menú a base de hortalizas, legumbres, pastas y frutas no tiene porqué ser aburrido ya que puede completarse con análogos de la carne y de pescados veganos.

“Está generalizada la idea de que la comida vegana es aburrida e insípida y es todo lo contrario. Cualquier plato se puede veganizar con dos o tres ingredientes y sabiendo qué especias puedes utilizar para hacer platos sabrosos y sencillos”, señala la responsable de comunicación de la UVE.

“La gente -añade- está acostumbrada a recetas sota, caballo y rey y no contempla el hecho de que se pueda hacer alquimia con los vegetales, las legumbres y las carnes veganas”.

navidades veganas
Vista de diferentes tipos de comida vegetariana en el congreso HIP (Hospitality Innovation Planet). EFE

Rosas de calabacín y queso vegano, lasaña con bechamel de leche de soja, hojaldres de verduras, pastel de no pollo o turrón de chocolate y quicos son algunas de las propuestas de la UVE.

“No nos privamos de los caprichos navideños, ni de poner en la mesa todo lo mejor”, señala Laura Jiménez quien opina que también es una oportunidad para que otros comensales no veganos se sorprendan probando nuevos platos.

Considera que para evitar tensiones cuando personas veganas van invitadas a otras casas lo mejor es hablar previamente del menú con los anfitriones, ya que la mayoría confunde vegetarianismo (excluyen carnes y pescados pero no derivados) con veganismo e, incluso, propone llevar platos veganos para compartir y no sentirse excluido de las celebraciones.

En caso de ir a un restaurante, es necesario hablar con el establecimiento para ver qué opciones veganas tienen, “aunque a veces es inevitable que te ofrezcan un menú un poco pobre, con parrillada de verdura o ensalada”.

De hecho, la UVE, con unos 300 socios en toda España, además de instruir a las personas que se adentren en el vegetarianismo y veganismo, asesora a los restaurantes en este tipo de menús.

Menú ligero o no tanto

Es cierto que un menú de vegetales tiene menos grasa que aquellos a base de productos animales, fiambres y quesos, pero también depende de las técnicas de preparado y cocinado.

“En general, los menús a base de vegetales suelen ser más ligeros porque tienen menos calorías que otros grupos de alimentos como conjunto, pero según la forma de cocinarlos, hay platos veganos ricos en grasa o fritos que no tienen por qué resultar más ligeros ni menos pesados que un pescado al horno, por ejemplo”, explica la doctora Ana Isabel Sánchez Marcos, vocal del Comité Gestor del Área de Nutrición de la SEEN.

En la misma línea, Laura Jiménez comenta que una cena ligera sería a base de ensalada, untables, verduritas o alguna legumbre cocinadas de forma sencilla, pero un menú navideño es más elaborado con hojaldres, carnes veganas con salsas o postres más cercanos a lo tradicional.

navidades veganas
Tipo de comida tradicional vegana de los monjes budistas. EFE/Edurne Morillo

Bebidas veganas

Muchas personas abrazan el veganismo como una filosofía de vida saludable por lo que descartan el alcohol de las bebidas y optan por zumos naturales y tés fríos, entre otras opciones.

En caso de tomar vino o cerveza veganos, estas bebidas cuentan con certificación, como la V-Label, el sello más común, de la Unión Vegetariana Europea.

“Tanto el vino como la cerveza son de origen vegetal pero en su proceso de elaboración, especialmente en clarificado, se utilizan a menudo sustancias de origen animal (albúmina de huevo, caseína de leche, gelatina de cola de pescado…) no aptos para veganos estrictos, pero cada vez hay más alternativas de origen vegetal o mineral utilizados como clarificantes o simplemente la sedimentación”, explica la endocrinóloga.

Especifica que existen sellos de certificación de vinos y cervezas que no deben confundirse con los ecológicos, que hacen referencia “al impacto medioambiental del proceso productivo en el campo y bodega y no necesariamente un vino ecológico ha de ser vegano y viceversa”.

Atención a los regalos o la decoración

El veganismo no es solo una forma de alimentación, es también un estilo de vida centrado en la ética y el respeto por otros seres vivos. Los regalos también forman parte de unas navidades veganas.

“Para nosotros es muy obvio, pero las personas no son conscientes de que no pueden regalarnos nada de piel de animal como una cartera, un cinturón o unos zapatos. Pero tampoco un jersey de lana de oveja”, relata Laura.

Las personas veganas se fijan en las etiquetas antes de comprar y descartan todos los productos que procedan de animales y se aseguran de que estén libres de sufrimiento animal.

También ocurre con la cosmética ya que algunos productos están hecho con miel de abeja o con colágeno.

“Tampoco regalar animales, evitar que esos seres vivos sean un capricho y luego queden desatendidos”, apunta la integrante de la Unión Vegetariana Española.

Y descartar regalar entradas para espectáculos como el circo o ir a los zoológicos al considerar “que son espacios donde se explotan a los animales, no compartimos esa forma de ocio”.

“Si quieren hacer regalos a una persona vegana pueden recurrir a libros sobre veganismo y de recetas veganas o colaborar con alguna asociación o protectora animal”, concluye Laura Jiménez.

Y como colofón de unas navidades veganas citar la decoración, llena de luces y de velas. Si las velas están hechas de cera de abeja no estarán alumbrando las casas de las personas veganas, serán de cera de soja.

La entrada Navidades veganas, un punto de inflexión más allá de la mesa se publicó primero en EFE Salud.

Seguir leyendo

Ciencia y Salud

Robe Iniesta canceló sus conciertos en 2024 por un tromboembolismo pulmonar: te contamos qué es

Publicado

el

Por

Robe Iniesta, líder de Extremoduro, referente del rock nacional, ha fallecido este miércoles a los 63 años por causa que no ha trascendido, aunque en noviembre del año pasado la agencia que le representa difundió un comunicado en el que informaba de que como consecuencia de un tromboembolismo pulmonar, se veía obligado a cancelar los conciertos programados y a guardar “reposo absoluto”.

El tromboembolismo pulmonar, también conocido como embolia pulmonar, es una de las complicaciones más graves derivadas de la formación de trombos en el sistema circulatorio. 

Según la Fundación Española del Corazón, se trata de “una oclusión o taponamiento de una parte del territorio arterial pulmonar (vasos sanguíneos que llevan sangre pobre en oxígeno desde el corazón hasta los pulmones para oxigenarla) a causa de un émbolo o trombo que procede de otra parte del cuerpo”.

Añade esta entidad en su web que en la mayoría de los casos el trombo o coágulo “se forma en las venas de los miembros inferiores y migra hasta la arteria pulmonar”.

La oclusión, por tanto, afecta sobre todo a los pulmones y al corazón, de modo que una zona de los pulmones recibe sangre pobre en oxígeno, y como no se puede oxigenar adecuadamente, perjudica la llegada de dicho oxígeno al resto de órganos.

El corazón seguirá bombeando sangre a los pulmones, pero la oclusión no permitirá la circulación adecuada, por lo que aumentará la presión dentro de la arteria pulmonar. El ventrículo derecho del corazón, por ello, se irá debilitando.

Cuenta la Fundación que las manifestaciones clínicas o síntomas más frecuentes son:

  • Disnea (sensación de falta de aire).
  • Dolor torácico.
  • Mareo o desvanecimiento.
  • También puede aparecer fiebre y tos con sangre cuando se acompaña de un infarto pulmonar. 
  • Si el trombo es muy grande y obstruye la arteria pulmonar principal, puede provocar incluso la muerte.

Cómo se detecta el tromboembolismo pulmonar

Por tanto, los signos más comunes incluyen dificultad para respirar, dolor en el pecho y tos, pero los pacientes pueden presentar síntomas leves o incluso ser asintomáticos.

Durante la pandemia de covid-19, diversos estudios demostraron una alta incidencia de tromboembolismo pulmonar en pacientes hospitalizados. 

Investigaciones del Hospital Ramón y Cajal y del CIBER de Enfermedades Respiratorias revelaron que el 7,8 % de los pacientes ingresados por covid-19 sufrió embolias pulmonares y que la prevalencia aumentaba hasta el 27,9 % en las unidades de cuidados intensivos. 

El tratamiento del tromboembolismo pulmonar se centra en evitar la progresión del coágulo y prevenir nuevos episodios

En el Hospital del Mar de Barcelona, los médicos observaron que uno de cada tres pacientes semicríticos con ventilación no invasiva desarrollaba una embolia pulmonar si acababa siendo intubado.

El diagnóstico suele apoyarse en pruebas como el análisis del D-dímero, un marcador de coagulación que se eleva cuando existe formación de trombos, y en estudios de imagen como el TAC o la ecografía de miembros inferiores. 

Estas herramientas permiten confirmar la presencia del coágulo y determinar su localización exacta.

Cómo se trata el tromboembolismo pulmonar

El tratamiento del tromboembolismo pulmonar se centra en evitar la progresión del coágulo y prevenir nuevos episodios. 

Los especialistas recomiendan el uso de anticoagulantes, como la heparina, para reducir el riesgo de formación de trombos. 

Indica la Fundación Española del Corazón en su web que en una minoría de pacientes, habitualmente los más críticos o en aquellos que no pueden recibir anticoagulantes, se requieren otros tratamientos como la fibrinólisis para acelerar la disolución del coágulo o la colocación de un filtro en la vena cava para evitar que nuevos trombos migren al pulmón.

Por regla general, pasados los primeros días y una vez en su domicilio, el paciente deberá tomar anticoagulantes por vía oral (Sintrom, Xarelto, Eliquis, Pradaxa y Lixiana) durante un periodo mínimo de 3 meses. 

MICROCÍTICO
Radiografía de unos pulmones. EPA/EFE

Avances recientes han permitido desarrollar herramientas predictivas que ayudan a los profesionales sanitarios a valorar el riesgo de muerte en pacientes con embolia pulmonar aguda. 

Según un estudio del Hospital Germans Trias, nuevas tecnologías permiten decidir mejor el lugar de ingreso y el tratamiento más adecuado, reduciendo tanto los ingresos innecesarios como las altas prematuras. 

La embolia pulmonar tiene una incidencia de entre 39 y 115 casos por cada 100.000 habitantes y puede alcanzar una mortalidad del 30 % en sus formas más graves.

En el ámbito oncológico, una nueva escala genética validada en 2023 permite predecir el riesgo de trombosis y tromboembolismo pulmonar en pacientes con cáncer, facilitando la aplicación de tratamientos preventivos y mejorando la supervivencia. 

La entrada Robe Iniesta canceló sus conciertos en 2024 por un tromboembolismo pulmonar: te contamos qué es se publicó primero en EFE Salud.

Seguir leyendo

Ciencia y Salud

España tiene a sus médicos jóvenes agotados: las alarmas que enciende este informe

Publicado

el

Dice la Organización Médica Colegial de España (OMC) en un reciente informe: “Resulta especialmente paradójico” que los médicos y las médicas más jóvenes sufran tasas tan altas de ‘burnout’ (desgaste y estrés asociados al ejercicio de la profesión) cuando se encuentran en una etapa vital y laboral que “debería estar marcada por la ilusión, la motivación vocacional y el entusiasmo por el aprendizaje”.

Resulta que ni ilusión, ni motivación, ni entusiasmo. Los médicos jóvenes de España están agotados, quemados, por factores como “la sobrecarga laboral, las guardias de 24 horas sin libranza efectiva, la precariedad contractual y la desigualdad de género”, según el informe citado, que se llama ‘Ikerburn: de la vocación al agotamiento’. Fue presentado en el Senado hace poco menos de un mes.

Para la OMC, la lectura es clara: si las personas más jóvenes de la profesión médica sufren sobrecarga de trabajo, precariedad y desigualdad, se resienten “la salud y bienestar de los profesionales, la seguridad del paciente y la sostenibilidad del sistema sanitario”.

‘Burnout’ en más del 50 % de los encuestados/as

“El panorama exige respuestas urgentes que vayan más allá de intervenciones aisladas y apunten hacia reformas organizativas, culturales y legislativas que garanticen condiciones de formación y trabajo saludables, equitativas y seguras”, concluye el estudio, que añade acto seguido: 

“El abordaje del ‘burnout’ debe considerarse una prioridad de política sanitaria y una inversión estratégica en capital humano, imprescindible para asegurar la calidad y la continuidad de la atención médica en España”.

El cuidado de los que cuidan a la población sale cuestionado de este informe compuesto por datos rotundos, procedentes de las respuestas dadas por más de 1.400 médicas y médicos con una media de edad ligeramente superior a los 31 años, casi todos cursando primera especialidad (98 %) en la esfera pública.

El perfil de la muestra, de hecho, sería más o menos el siguiente: mujer de poco más de 30 años, en primeros dos años de residencia y en primera especialidad relacionada con la asistencia en hospitales públicos. Además, hace guardias de 24 horas tras las que es difícil librar.

La radiografía que lleva a cabo el informe muestra los siguientes datos:

  • Más del 79 % refiere “agotamiento emocional”.
  • Casi un 84 % habla de “despersonalización”.
  • Poco más del 63 % indica “baja realización personal”.

Agotamiento emocional, despersonalización y baja realización personal son, precisamente, los tres síntomas de ‘burnout’ convenidos a escala internacional. Cuando los autores del estudio combinan los tres vectores para dibujar un retrato más completo, los porcentajes aumentan. Casi un 94 % de los médicos encuestados tendría al menos uno de los síntomas, un 81 % presentaría dos y un 51 % reuniría los tres, el llamado ‘burnout’ completo.

Consecuencias en el descanso y en la vida sexual

Los y las profesionales entrevistados para el informe concretan más.

  • Dos de cada tres médicos “refieren insomnio o alteraciones del descanso”.
  • Tres de cada cuatro “perciben deterioro en sus vínculos familiares, de pareja o sociales”.
  • Un 85 % reconoce “disminución de la líbido”.
  • Un 38 % recurre a ansiolíticos, alcohol u otras sustancias como estrategia de afrontamiento.
  • Uno de cada cuatro ha tenido incapacidad temporal por agotamiento o causas vinculadas con el ‘burnout’.

No afectan por igual el desgaste y el estrés en la profesión médica cuando los que la ejercen son los más jóvenes. Como señala el estudio, las mujeres presentan más riesgos que los hombres (un 24 % más) y quienes cruzan sus primeros años de residencia están más expuestos al ‘burnout’, lo que lleva a otra conclusión: la juventud es un factor de vulnerabilidad debido a la falta de experiencia.

pandemia covid-19 enfermera
UCI en el Hospital Puerta de Hierro de Madrid en abril de 2020. EFE/JuanJo Martín

Son factores de riesgo, asimismo, la concatenación de guardias, porque acumular 5 al mes sin descansar adecuadamente después es causa de altos niveles de ‘burnout’, y la especialidad del encuestado/a, pues las quirúrgicas y las de atención hospitalaria urgente conllevan elevados niveles de exigencia.

Riesgo de “fuga de talentos”

Para la OMC, las consecuencias son graves. Se trata de un “problema estructural” del sistema que impacta en la seguridad del paciente por cuanto arrastra una mayor probabilidad de errores clínicos o de calidad asistencial, y merma los recursos, sobre todo por el incremento de bajas laborales, rotaciones o, sencillamente, abandonos. El “riesgo de fuga de talentos” no puede soslayarse, apunta el informe.

La organización de los médicos traza vías de solución, desde el cumplimiento de la normativa laboral a la reducción de cargas administrativas pasando por los refuerzos de planes de conciliación, de apoyo psicológico (como el PAIME, el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo, poco conocido por los profesionales, como desgrana el informe) y de formación.

Planteado como vía de solución, el proyecto de nuevo Estatuto Marco propuesto por el Ministerio de Sanidad, pero su contenido no convence a los sindicatos médicos. En protesta, han convocado jornadas de huelga, la primera este martes. Reclaman un estatuto propio, independiente del personal sanitario y no sanitario que integra el Sistema Nacional de Salud, y una regulación diferente de aspectos como las guardias o ratios de pacientes.

La entrada España tiene a sus médicos jóvenes agotados: las alarmas que enciende este informe se publicó primero en EFE Salud.

Seguir leyendo

Ciencia y Salud

¿Tomar fármacos contra la obesidad sin hacer dieta ni ejercicio? Un error con consecuencias

Publicado

el

Intentar bajar de peso con los fármacos contra la obesidad y la diabetes, los análogos de la GLP-1, pero sin hacer dieta ni ejercicio físico, “es una equivocación total” que puede tener consecuencias, como efecto rebote o, incluso, pérdida severa de masa y fuerza muscular, advierte Jordi Salas-Salvadó, catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad Rovira y Virgili de Tarragona.

“Me he encontrado con muchas personas que quieren bajar de peso sin hacer ningún esfuerzo, sin cuidarse, sin hacer ejercicio, sin tener que hacer dieta. Esto es una equivocación total”, asegura en una entrevista con EFE Salud.

El catedrático e investigador celebra la llegada de estos fármacos contra la diabetes y la obesidad (los popularmente conocidos Ozempic o Mounjaro) convencido de que van a ayudar a muchas personas, pero considera que “se está haciendo un uso irracional” de estos medicamentos.

“No está indicado tomar el fármaco sin dieta y sin ejercicio físico”, insiste el también director del programa de Nutrición del Centro de Investigación Biomédica en Red de la Obesidad (CIBERobn).

“Primero hay que probar si se puede alcanzar un peso normal a través de dieta y de ejercicio y después tener la autorización de los fármacos, pero siempre con la base de la dieta y el ejercicio físico”, explica.

Y advierte: “El problema con los análogos de la GLP-1 es que a muchos les dan nauseas, les quitan el hambre y eso va muy bien para bajar de peso, pero si no cuidas la dieta, si haces dietas deficitarias, una de las posibles consecuencias de este tipo de fármacos es que pueden producir sarcopenia, pérdida de masa y fuerza muscular, en personas con obesidad y en mayores”.

Pero también otra de las consecuencias es el denominado, efecto rebote: “Cuando una persona toma un fármaco sin hacer ejercicio ni dieta, baja de peso y es entonces cuando lo deja de tomar y se produce un efecto yo-yo”, recupera los kilos perdidos.

fármacos obesidad dieta
El catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad Rovira y Virgili de Tarragona Jordi Salas-Salvadó. Foto cedida

La dieta mediterránea, la mejor opción

La dieta mediterránea es el patrón de alimentación que más evidencia científica demuestra en el control de la obesidad y puede ser la más indicada para complementar este tratamiento con fármacos antiobesidad.

“Dependiendo de la restricción calórica que produce el fármaco, puede ser la dieta mediterránea suplementada con otras proteínas, vitaminas y minerales” para evitar deficiencias.

Al margen de estos fármacos, aunque hay diferentes estrategias nutricionales para combatir la obesidad, la dieta mediterránea es la que ocupa el primer lugar, como se ha constatado en la reciente reunión nacional de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) celebrada en Toledo en la que participó Jordi Salas-Salvadó.

“La adherencia a una dieta mediterránea ligeramente hipocalórica, acompañada de actividad física es la mejor estrategia para bajar peso en una persona con sobrepeso u obesidad”, asegura.

En su opinión, “hay diferentes formas de comer saludable pero la que más evidencia científica reúne es la dieta mediterránea” y quedan demostrados sus beneficios en el control de peso y de la diabetes tipo 2 y en la reducción de los factores de riesgo cardiovasculares y de cáncer de mama.

Y así lo han probado dos estudios principales el Predimed 1 y Predimed Plus, los que albergan mayor número de pacientes y recorrido en el tiempo, y tras ser comparada con otras dietas, como la nórdica o la vegetariana.

Dieta mediterránea
EFE/Kai Försterling

La base de nuestra alimentación

Esta dieta, a base de frutas, verduras, legumbres, pescado, frutos secos y aceite de oliva, no solo es una herramienta contra la obesidad y otras enfermedades sino que debe ser el patrón de alimentación, como lo era en los años 60 en España.

La adherencia a esta dieta mediterránea se valora por una escala tipo de 14 puntos y, según el profesor, refleja que las personas a partir de los 55 años, sobre todo las mujeres, y con un nivel cultural y económico más alto “son más conscientes de que deben alimentarse mejor y que deben hacer ejercicio”.

La educación en hábitos saludables en los niños es fundamental, pero no solo en las escuelas, también en casa porque, reconoce, “los adultos tampoco damos ejemplo”.

“Vivimos en un mundo de prisas, estamos abandonando la cocina clásica y se ha triplicado el consumo de procesados en las últimas dos décadas. Y esto es la industria. Pero es que la industria hace lo que demanda el consumidor”, afirma.

Y advierte que a través de la epigenética se sabe que si los padres comen mal, esto se transmite a los hijos mediante cambios en la metilación de los genes y en estudios con ratas se ha observado que «pasa con tres, cuatro y cinco camadas”, apunta.

“Somos responsables -subraya- de lo que va a pasar en los próximos años y, además, con el problema añadido que estamos destruyendo el planeta por culpa de este sistema alimentario que tenemos”.

El ayuno intermitente

Jordi Salas-Salvadó participó hace más de un año en una revisión bibliográfica, publicada en la revista British Journal of Medicine, sobre los estudios relativos al ayuno intermitente y su eficacia para la pérdida de peso y para los factores de riesgo cardiovasculares.

Comparado el ayuno intermitente con una dieta hipocalórica tradicional, “solo encontramos que esta dieta en días alternos tenía un pequeño beneficio” a corto plazo, porque a largo plazo no hay estudios en obesidad.

“Y yo he visto muchos estudios a corto plazo que luego a largo plazo no se reproducen, por ejemplo las dietas muy hipocalóricas que se hacían hace unos años con líquidos o sustitutos de comida”, añade.

Por tanto, respecto a la efectividad en la pérdida de peso a largo plazo “con lo único que tenemos evidencia es con la dieta mediterránea ligeramente hipocalórica”, que es eficaz y segura, concluye el catedrático de la Universidad Rovira y Virgili.

La entrada ¿Tomar fármacos contra la obesidad sin hacer dieta ni ejercicio? Un error con consecuencias se publicó primero en EFE Salud.

Seguir leyendo

Más Leidas