El objetivo de esta guía, que llega cuando casi se cumplen seis meses de la tragedia de la dana, es proporcionar recomendaciones prácticas y actualizadas a administraciones, profesionales, comunidades y sociedad civil, sobre cómo actuar en caso de catástrofes de este tipo, tanto a corto como a medio plazo especialmente en la salud pública.
La guía está estructurada en función del impacto y las perspectivas que no se deben descuidar ante una catástrofe:
Salud mental
Vigilancia en la salud pública
Mortalidad
Alimentación y nutrición
Personas con cáncer
Vacunación
Salud laboral, la formación y el empleo
Determinantes sociales de la salud
Perspectiva de género y diversidad
Recogida alimentos y enseres de primera necesidad en el pabellón de Florida Universitaria en Catarroja. EFE/ Ana Escobar
Refuerzos necesarios
Desde la SEE advierten de que las inundaciones y daños derivados de catástrofes como la dana generan riesgos como:
Contaminación del agua potable
Proliferación de vectores (mosquitos, roedores…)
Exposición a sustancias tóxicas
Por ello es fundamental garantizar el suministro de agua segura, así como monitorizar la calidad del aire y gestionar residuos peligrosos. En este sentido, la sociedad científica recuerda que, según la Organización Meteorológica Mundial, las alertas tempranas -con 24 horas de antelación- pueden reducir los daños hasta en un 30 %.
Además, la interrupción de servicios básicos aumenta el riesgo de brotes de enfermedades gastrointestinales y respiratorias. Por ello, la SEE propone reforzar los sistemas de vigilancia para la detección temprana de posibles brotes asociados a enfermedades infecciosas, y difundir información clara, precisa y transparente adaptada a las necesidades del público general.
Por otro lado, insisten en que para comprender la magnitud y características de una catástrofe, es preciso disponer de información veraz y a tiempo real: una correcta gestión de los datos sobre la mortalidad no solo facilita la planificación de la respuesta, sino que también combate la desinformación y refuerza la confianza de la ciudadanía en las instituciones.
Varios vecinos colaboran en la limpieza de una vivienda en Catarroja, Valencia. EFE/J.J. Guillén
Atención a los grupos vulnerables
En esta Guía, la SEE también advierte de la importancia de priorizar la atención a los colectivos más vulnerables, y de considerar los determinantes sociales de la salud para garantizar una respuesta equitativa y eficaz.
Por ello llaman a tener especialmente en cuenta a las personas en situación de vulnerabilidad como:
Personas de bajos ingresos
Menores de edad
Personas con trabajos informales
Personas mayores o institucionalizadas
Personas con discapacidad
Tras una catástrofe por fenómenos meteorológicos, es frecuente el aumento de trastornos como estrés postraumático o ansiedad, especialmente entre quienes sufren pérdidas materiales o personales.
Por ello, propone reforzar la Atención Primaria y la red de Salud Mental, garantizar apoyo psicológico a los equipos de rescate y diseñar planes de intervención específica para niños, niñas y adolescentes de las zonas afectadas, entre otras acciones.
Vista de una pancarta de agradecimiento entre los residuos en Paiporta (Valencia). EFE/Kai Forsterling.
Asimismo, la sociedad científica pone el foco sobre los pacientes oncológicos, que pueden experimentar cambios en sus esquemas de tratamiento tras una tragedia de estas magnitudes. En estos casos, se recomienda flexibilizar las citas médicas y facilitar el transporte a centros sanitarios para evitar interrupciones en los tratamientos.
Con respecto a la vacunación, la SEE recuerda que resulta fundamental mantener las coberturas de las vacunas recomendadas en los programas de vacunación, así como revisar el estado de vacunación de los profesionales sanitarios o de las personas que hayan resultado heridas o que hayan estado en contacto con materiales contaminados
Por último, insisten en la importancia de contar con profesionales formados para responder de manera rápida y efectiva ante crisis complejas y emergencias sanitarias. La formación en epidemiología de campo y en la respuesta ante situaciones de desastre resulta esencial para prevenir daños mayores y garantizar la continuidad de los servicios de salud pública.
Bruselas (Euractiv.com/.es) – Europa se está quedando rezagada en el cumplimiento de los objetivos de la ONU para hacer frente al VIH, la hepatitis y otras infecciones relacionadas con el consumo de drogas inyectables y el contacto sexual, según alertó este miércoles el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC)
Europa y otros países se comprometieron en 2015 a poner fin a las epidemias de sida, tuberculosis y otras enfermedades transmisibles para 2030, en el marco de su compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
«Tenemos un plan de rescate ante nosotros, en la declaración política. Ahora es el momento de levantar las palabras de la declaración de la página, e invertir en desarrollo a escala como nunca antes» comentó en 2024 el Secretario General de la ONU, António Guterres.
Pero a pesar de algunos avances en la reducción de las nuevas infecciones por VIH y tuberculosis desde 2010, la UE no consigue que las pruebas y el tratamiento se distribuyan de forma más uniforme en todo el bloque, sobre todo en Europa del Este.
Según el ECDC eso aleja a la UE de la mayor parte de sus objetivos para 2025.
«Esas enfermedades se pueden prevenir, al igual que la carga que suponen para los sistemas sanitarios, los pacientes y sus familias», explica Pamela Rendi-Wagner, directora del centro europeo,con sede en Estocolmo.
En toda Europa se están reestructurando los presupuestos hacia la defensa.
«Tenemos cinco años para actuar; debemos hacer que cuenten», añade.
Aunque la tuberculosis no es una infección de transmisión sexual, el VIH debilita el sistema inmunitario y se sabe que es un factor de riesgo común.
Por su parte, las hepatitis víricas B y C causan la mayoría de las casi 57.000 muertes anuales atribuidas al sida, la tuberculosis y las hepatitis víricas en la UE y el Espacio Económico Europeo (EEE), según el informe.
En cuanto al VIH, la UE no invierte lo suficiente en diagnóstico e investigación de vacunas, según un estudio reciente.
«Ya estábamos lejos de alcanzar los objetivos de ONUSIDA por diversas razones, entre ellas las deficiencias en el acceso, la estigmatización y las deficiencias del sistema sanitario», afirma Roger Tatoud, autor principal del estudio, quien añade que la situación ha empeorado desde que la UE y los gobiernos occidentales recortaron los presupuestos de ayuda.
El ECDC también recomienda ampliar los servicios integrados de pruebas y tratamiento para mejorar la cobertura entre las poblaciones de riesgo, así como ampliar los centros de pruebas y las medidas de prevención, entre ellas los fármacos antirretrovirales PrEP y la vacunación contra la hepatitis B.
Un reciente estudio francés publicado en The Lancet afirma que ampliar las posibilidades de quién puede recetar la PrEP, por ejemplo farmacéuticos en lugar de sólo médicos generalistas, podría ayudar a ampliar el acceso.
En cuanto a la prevención, la agencia europea afirma que los países deberían proporcionar «servicios de contención de daños para las personas que se inyectan drogas» y promover el uso del preservativo.
Ucrania es el país con mayor número de infecciones por el VIH, alrededor de 348.895 según estimaciones recientes de la OMS. El acceso a las pruebas y el tratamiento se ha deteriorado desde la invasión rusa del país hace tres años.
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(Editado por DE/Euractiv.com y Fernando Heller/Euractiv.es)
“Las mujeres otorgan menor importancia que los hombres a tener una relación de pareja… ¡Seguro que esto no te lo esperabas!”, destaca Cecilia Bizzotto Echerri, socióloga especialista en todo tipo de relaciones sexuales y de pareja.
Casi la mitad de las mujeres respondieron que es “poco o nada importante” estar emparejadas para sentir que su vida es plena, mientras que alrededor del 74% de los hombres dijo que tener una relación de pareja es “muy o bastante importante”.
¿Están cambiando los valores sociales y las jóvenes de España han deconstruido el ideal de la media naranja?
Si a las mujeres se nos educó en el pasado para ser devotas esposas y madres, ¿qué ha pasado para que ahora restemos importancia a la pareja? ¿Por qué esta brecha entre generaciones y géneros?
Casi el 50 % de l@s jóvenes entre 18 y 24 años considera que “tener pareja sexual es poco o nada importante”
La encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) en 2025 sobre relaciones sexuales y de pareja arrojó un montón de datos interesantes y hoy nos centramos en uno de ellos: las personas jóvenes dan menos importancia a la relación de pareja.
A nuestras abuelas y madres les impusieron el ideal de la monogamia, el “fueron felices y comieron perdices”, la media naranja y la importancia del matrimonio y la crianza como medio para la plenitud.
Para ellas, el destino obligado era cuidar a su esposo y de sus hijas, así que la carrera profesional no era el foco de sus vidas y la dependencia del marido era absoluta.
¡Recordemos que hasta el 1981 en España las mujeres no tenían control sobre su economía, incluso para firmar un contrato laboral o abrir una cuenta bancaria necesitaban la autorización de su marido!
Muchas cosas han cambiado en muy poco tiempo, pero otras se han quedado igual: ¿Sabías que, a día de hoy, las mujeres dedican el doble de tiempo al cuidado de los hij@s que los hombres?
Este dato nos ayuda a comprender otro de un reciente estudio canadiense: los hombres casados tienen cuatro veces más probabilidades de envejecer con éxito en comparación con sus homólogos solteros, mientras que las mujeres no experimentan este mismo beneficio al estar casadas.
De hecho, según otro estudio estadounidense, las mujeres sin marido y sin hijos son las más felices.
Comenzamos a atar cabos: el sistema monógamo fue pensado para la subyugación de la mujer, una bonita estrategia revestida de amor romántico y cuentos de hadas para que nos quedáramos limpiando y cocinando casa.
Sin embargo, las mujeres nos hemos dado cuenta de que no necesitamos “medias naranjas” para ser felices y, de hecho, observamos que el matrimonio es para muchas una cárcel de cuidados, “hasta que la muerte nos separe”.
La juventud cada vez tiene más claro que el amor no lo es todo y existen otros vínculos valiosos.
Si bajamos a la pareja del pedestal, podemos descubrir amor infinito en muchas otras relaciones: las amigas, las vecinas, las colegas del trabajo, la primas que nos encontramos los veranos en el pueblo…
¡Ni siquiera necesitamos parejas para disfrutar de nuestra sexualidad! Podemos masturbarnos, tener encuentros fugaces o aventuras recurrentes y sentirnos muy pero que muy bien.
Nos hicieron creer que la “solterona” de los gatos era una infeliz y quizá simplemente era una mujer libre.
¡Elijas estar solter@, en pareja monógama o en una relación abierta, haz lo que te haga sentir plen@!
“En mi videoblog para EFEsalud vamos a estar analizando qué piensan los y las españolas sobre su sexualidad y sus relaciones”, indica Cecilia Bizzotto, quien nos ofrece toda su experiencia profesional a través del ciberespacio para hacer llegar sus mensajes hasta el último rincón humano del planeta Tierra.
Cecilia Bizzotto es graduada en Sociología por la Universidad Complutense de Madrid, máster oficial en Sexología, Educación Sexual y Asesoramiento Sexológico por la Universidad Camilo José Cela y desarrolla proyectos de investigación sexológica y científica “LabSex” en la Universidad de Granada.
También está especializada en relaciones humanas y sexualidades más allá de la norma: no monógamas (NMC) y disidentes (identidades no alineadoras con los roles y cánones impuestos desde la heterosexualidad).
“Y recuerda, siempre, que tienes el derecho a disfrutar de tu sexualidad de forma libre, sana y segura sea cual sea tu género“, concluye nuestra socióloga Cecilia Bizzoto, una mujer apasionada por la innovación y la divulgación.
Los datos que se ofrecen en el videoblog se encuentran recogidos en el estudio “Relaciones sexuales y de pareja” del Centro de Investigaciones Sociológicas que se realizó entre el 22 y el 30 de enero de 2025 con una muestra de 3.856 entrevistas.
En cuanto a los términos para definirse o identificarse, el 85,4 % de quienes han participado en la encuesta se sienten heterosexuales, un 5,9 % bisexuales y un 2,8 % homosexuales.
Con motivo del Día Internacional del Libro, 23 de abril, los profesionales de la Clínica Universidad de Navarra destacan el impacto positivo que tiene leer en la salud desde las primeras etapas de la vida.
En EFEsalud hablamos con el doctor José Manuel Moreno, director del Departamento de Pediatría de la Clínica Universidad de Navarra, quien subraya que leer desde edades tempranas favorece el desarrollo intelectual, mejora la capacidad de atención y amplía el vocabulario.
“No se trata solo de adquirir conocimientos, sino de formar personas más comunicativas, empáticas y seguras de sí mismas”, explica el especialista, quien también defiende la lectura como una alternativa saludable frente al uso excesivo de pantallas.
Los beneficios para la salud de leer en edad temprana
El doctor explica que leer desde edades tempranas favorece aspectos como:
El desarrollo del lenguaje.
La adquisición de hábitos como la atención y la concentración.
”No solo se trata de estas habilidades más materiales, sino que todo el desarrollo intelectual del niño se ve condicionado por la lectura. Incluso cuando son muy pequeños, el simple hecho de que les lean cuentos ya tienen un efecto muy positivo”, indica el experto.
Según el doctor, un niño que lee habitualmente tiene un vocabulario más amplio, lo que le permite expresarse de manera más clara y efectiva.
Todas estas virtudes fortalecen la confianza en sí mismos y fomentan hábitos esenciales para el desarrollo integral, ya que inciden en su capacidad para comprender, escribir y expresarse.
Además, al saber comunicar sus ideas con más palabras, se favorece su habilidad para relacionarse con el mundo, contribuyendo así de forma significativa a su desarrollo intelectual.
Hacer frente a las pantallas
El experto señala que, frente a las alternativas tan atractivas que existen a la lectura, como pueden ser las pantallas, es un gran reto que los niños continúen leyendo.
Una de las estrategias para conseguirlo sería incorporar desde muy pequeños la lectura como una rutina.
”Por ejemplo, antes de irse a la cama lean o les lean un cuento. No hace falta que sea durante mucho tiempo ni con textos complejos. Lo importante es que participen, que se sientan protagonistas de la historia, ya sea leyendo o representando a alguno de los personajes”, aconseja el doctor.
En el caso de niños más mayores, el experto explica que puede ayudar mucho comentar con ellos lo que leen o lo que nosotros estamos leyendo”
”Hay que hacerles partícipes de nuestras propias inquietudes lectoras. Por ejemplo, contarle lo que hemos leído, explicarle de qué trata y preguntar si lo conocen, que les parece el autor o la historia” indica el especialista.
Estrategia en el aula
El doctor señala que la mejor estrategia es que la lectura sea participativa.
”Hay niños a quienes les cuesta leer de forma continuada, pero si se les dedica un rato a que cada uno lea en voz alta un fragmento, se puede lograr una implicación mayor”.
También ayuda introducir elementos sorpresa durante la lectura para, en un momento clave de la narración, hacer preguntas que despierten su imaginación y les involucren en la historia.
Otra opción que destaca el experto es representar una obra de teatro basada en un libro.
”Aunque sea una adaptación sencilla, ese tipo de actividades despiertan la curiosidad del niño por saber más sobre la historia original”, señala el especialista.
Además, subraya que los cómics son una herramienta muy útil, bien narrado visualmente puede ser el punto de partida para que después quieran profundizar más en otros formatos de lectura.
¿Qué tipo de lectura es más adecuada?
Moreno explica que cuanto más pequeño es el niño, más peso tienen las imágenes.
Es decir, los cuentos con ilustraciones agradables y poco texto son los más adecuados para las primeras etapas.
Sin embargo, a medida que crecen es importante ir adaptando tanto la longitud del texto como el tipo de lectura.
”Un niño en edad escolar, puede tener más dificultad para leer clásicos en su versión original, así que conviene ofrecerle ediciones adaptadas, con un tamaño de letra adecuado, páginas que no estén demasiado recargadas de texto y un diseño atractivo”, señala el experto.
¿Fortalece la lectura las relaciones y ayuda a la salud mental?
Según el doctor, no es fácil establecer una relación directa del tipo: “Si lees esto vas a prevenir una adicción o vas a reducir el riesgo de suicidio”.
Sin embargo, sí cree que la lectura puede ser una herramienta valiosa, sobre todo en momentos de crisis.
”En el caso de adolescentes, muchas veces como padres podemos preguntarnos cómo acercarnos a nuestros hijos, cómo ayudarles a mejorar su bienestar emocional y ahí la lectura, cómo otras formas de cultura, puede ser un punto de encuentro. Algo de lo que hablar juntos, una excusa para abrir una conversación o compartir una experiencia”, aconseja.
También recalca la importancia de dar ejemplo, pues si en casa no se ve que los padres leen, si no se vive la lectura como algo habitual, es difícil fomentar ese hábito en los hijos.
Para los padres hay libros sobre cómo enseñar hábitos saludables, como la alimentación.
También hay libros dirigidos a los propios niños que, a través de cuentos o ilustraciones, transmiten valores sobre el autocuidado.
El doctor recomienda cualquier libro de Gloria Fuertes, que aunque no hablen directamente de salud, están llenos de reflexiones, pensamiento infantil y mensajes que ayudan al desarrollo emocional, que también es parte de la salud.
También hace hincapié en los clásicos adaptados para edades tempranas como las novelas de Julio Verne o Robinson Crusoe, que ofrecen historias donde los niños pueden verse reflejados en situaciones de superación o aventura, que también aportan enseñanzas valiosas.
El doctor José Manuel Moreno. Foto cedida por la Clínica Universidad de Navarra.